Esposa Pecadora romance Capítulo 1087

Jeremy no sabía cuál era el regalo del que hablaba Ryan.

Sin embargo, tomó la llave del coche y se dirigió a la puerta de la cafetería. Cuando vio el coche de Ryan al lado de la carretera, se acercó lentamente.

El sol de la tarde de verano era cálido. Los rayos brillaban ligeramente sobre el coche, y a través de la ventanilla entreabierta del coche, Jeremy vio el impresionante rostro con el que soñaba cada día.

"Linnie".

Su corazón tranquilo encontró el deleite que solía sentir antes.

Jeremy abrió la puerta en silencio y olió el tenue aroma a rosas japonesas.

"Eveline estaba cansada, así que le dije que íbamos a salir para que despejara su cabeza. Encendí el incienso que hizo, así que ahora debería estar durmiendo profundamente. Puedes ir y pasar un tiempo con ella por última vez".

La voz de Ryan se escuchó desde atrás de Jeremy.

Jeremy entendió inmediatamente. "Gracias".

"Debería ser yo quien te diera las gracias. Has completado una difícil tarea de la Interpol y me has entregado a la persona que amas. No te preocupes, no te defraudaré".

Después de decir eso, Ryan se dio la vuelta y se fue para dejar que Jeremy tuviera ese momento.

Jeremy se sentó en el asiento del conductor y miró a la persona que dormía en el asiento del pasajero. Levantó su mano lentamente para acariciar el rostro de Madeline, pero no se atrevió a poner sus dedos sobre ella incluso después de mucho tiempo.

Tenía miedo de despertarla.

Comprendió que ella había estado agotada últimamente. No solo su cuerpo, sino también su corazón.

Jeremy se apoyó en la silla y miró el etéreo rostro dormido junto al suyo. Luego curvó las comisuras de sus labios para formar una dulce sonrisa.

‘Linnie, esto es genial. No esperaba verte por última vez’.

Cuando le pareció extraño, ella pudo oler vagamente el olor característico que llevaba Jeremy y que permanecía en el coche.

Era como si hubiera estado en ese coche hacía poco.

Sin embargo, él sí había estado en el coche poco antes. Solo que Madeline no lo sabía. Cuando ella olió el aroma con su nariz, solo sospechó si algo andaba mal con su nariz.

A continuación, Ryan llevó a Madeline a su casa. Como le preocupaba que ella lo pensara demasiado, inició una conversación al azar.

"He oído que han detenido a Lana y que pronto la castigarán. Ahora podrás vengar a tus padres".

Madeline seguía pensando en Jeremy. Cuando escuchó eso, volvió a la realidad. "Quiero ir a donde la han encerrado".

Ryan no quería contarle a Madeline sobre su verdadero trabajo, pero si ella se encontraba con Lana, todo quedaría al descubierto.

Reflexionó por un momento y sintió que no había razón para detenerla.