Esposa Pecadora romance Capítulo 1136

Madeline entró. Estaba a punto de subir cuando de repente escuchó la voz de Jeremy desde el baño.

"Ya he muerto una vez. ¿Crees que me importa? No me digas cómo hacer las cosas. Nuestra relación, en todo caso, es solo un negocio".

Madeline sintió que su corazón se apretaba al recordar su "muerte".

Sin embargo, ¿de qué clase de "negocios" estaba hablando Jeremy?

Madeline se dio la vuelta y se dirigió hacia la puerta del baño.

Sonó la rasposa voz de barítono de Jeremy. "Ella es mi límite. Retrocede o no habrá negociación alguna".

Madeline tuvo la sensación subconsciente de que la persona de la que hablaba Jeremy era ella.

Madeline no quería escuchar a escondidas su llamada telefónica, pero no podía ignorar la conversación.

En ese momento se abrió la puerta del baño.

Madeline levantó la vista para encontrarse con la mirada vacía de Jeremy. "¿A quién llamabas, Jeremy? ¿Ha pasado algo?".

"No te preocupes. Es solo trabajo". La evadió con una sonrisa leve.

Sin embargo, la conversación no tenía evidentemente nada que ver con el trabajo.

Madeline no insistió. Cuando pensó en lo que había sucedido en los últimos días, tomó las manos de Jeremy. "Ni siquiera hemos tenido la oportunidad de tener una buena comida, a pesar de que ya has vuelto hace tiempo, Jeremy. Quiero prepararte la cena esta noche. Vamos a olvidarnos de los niños esta noche. Solo seremos nosotros dos. ¿Te parece bien?".

"Por supuesto. Solo nosotros dos". Jeremy curvó sus labios en una pequeña sonrisa y los apretó contra la frente de Madeline.

Madeline fue entonces a comprar los ingredientes y empezó a prepararlos en la cocina.

El cielo comenzó a oscurecerse mientras Madeline empezaba a lavar los platos en la amplia cocina.

Este había sido su sueño desde hacía tantos años cuando se casaron: una vida sencilla y tranquila.

Sin embargo, el día nunca había llegado, a pesar de los años transcurridos.

Madeline acabó preparando una sencilla comida casera: tres platos y una sopa. Todos eran los favoritos de Jeremy.

Él no se dio cuenta del cambio en las expresiones de Madeline y siguió comiendo.

Después de la cena, los dos decidieron dar un paseo fuera.

Mientras caminaba a su lado, Madeline se volteaba para mirarlo de vez en cuando. Era como si fuera a salir corriendo si ella no mantenía sus ojos sobre él.

"¿Volverás a dejarme, Jeremy?", preguntó Madeline de repente.

Jeremy bajó la vista para encontrarse con su mirada. "No lo haré".

El corazón de Madeline se relajó mucho ante la respuesta, pero lo que él hizo durante la cena aún estaba fresco en su mente.

Al volver a la villa, Jeremy fue a bañarse.

Madeline abrió con cuidado la puerta del baño y miró al hombre que se duchaba tras las puertas de cristal.

Sus ojos se posaron en su ropa junto al perchero y entró cuidadosamente de puntillas. ¡Ella estaba alargando la mano para agarrar la ropa cuando la puerta de cristal de al lado se abrió de repente y el hombre que estaba dentro estiró la mano para detener a Madeline y meterla a la ducha con él!