Esposa Pecadora romance Capítulo 1193

Madeline no podía describir cómo se sentía en ese momento.

Cuando vio a Jeremy, su corazón alterado pareció calmarse al instante. El ritmo de sus latidos se fue relajando poco a poco gracias a la aparición de ese hombre.

Por otro lado, el estado de ánimo de Ryan era completamente opuesto al de Madeline.

Cuando estaba a punto de declarar a todos que ella era su esposa, Jeremy apareció inesperadamente.

La gélida mirada de Jeremy observó a Ryan antes de volver a mirar a Madeline. Sus delicados ojos eran dulces como la miel caliente cuando dijo sin prisa: "Querida, apenas quedaban plazas de estacionamiento. Siento haber llegado un poco tarde".

Madeline comprendió inmediatamente lo que Jeremy quería expresar. Sonrió ampliamente y se acercó al abrazo del hombre. "Jeremy, has llegado justo a tiempo".

Jeremy levantó la vista con sus ojos fríos y miró a las mujeres junto a Madeline. "Ah, ¿sí? Me preocupaba que, si llegaba un segundo más tarde, algunos entrometidos y ociosos te dieran problemas".

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Aquellas mujeres se dieron cuenta claramente de que Jeremy estaba hablando de ellas.

Habían querido burlarse de Madeline, pero no esperaban recibir tal comentario. Estaban muy avergonzadas.

Madeline se inclinó en los brazos de Jeremy como una pequeña y adorable mujer y dijo coquetamente: "Jeremy, cuando estabas estacionándote hace un momento, me encontré con el Señor Jones y entré con él. Pero es bueno saber que estas hermosas damas se preocupan tanto por ti que incluso me acusaron de estar con el Señor Jones sin considerar cómo te sentirías".

Cuando las mujeres escucharon las palabras de Madeline, parecieron aún más avergonzadas.

Cuando vio a Jeremy y a Ryan, el anciano dijo con orgullo: "¡Dos de los más destacados jóvenes y prometedores talentos de la Interpol!".

Los demás invitados de la sala de banquetes se inclinaron para mirar.

El anciano dio una palmadita en el hombro de Jeremy y exclamó con satisfacción: "Pensaba que el Señor Whitman era solo un joven rico de Glendale, pero que equivocado estaba; eres un hombre previsor que ha hecho un fantástico trabajo encubierto que no cualquiera podría haber hecho".

Miró a Madeline con admiración y dijo: "La Señora Whitman también tuvo que pasar por una dura tarea. Para colaborar con la Interpol y completar la misión encubierta, tuvo que soportar una infamia tan insoportable. Un comportamiento tan grande y recto es digno de elogio".

Cuando Madeline escuchó ese elogio, se sintió un poco mal.

La verdad era que, mientras pudiera estar con Jeremy, no le importaría enfrentarse a cualquier dificultad.