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Jeremy estaba en el ascensor y estaba subiendo para ver qué estaba pasando. Casualmente, vio a Ryan llevando a Madeline al ascensor.
Cuando la puerta estaba a punto de cerrarse, vio el brazo ensangrentado de Madeline y su cara pálida e inconsciente.
"¡Linnie!".
Jeremy sintió como si su alma hubiera abandonado su cuerpo. Sin embargo, cuando estaba a punto de perseguirlos, la policía en el techo lo vio.
"¡Es Jeremy Whitman!".
"¡Atrápenlo! ¡Disparen si se resiste!".
Jeremy solo tenía a Madeline en su mente en ese momento, así que no podía quedarse quieto y dejar que lo arrestaran.
Si lo arrestaban, no podría ver a Madeline y podría ser incriminado por Ryan una vez más.
Así pues, optó por tomar las escaleras. Entonces, soportó un dolor y un malestar intenso al salir del edificio de la Corporación Whitman.
Logró salir por la puerta lateral, y cuando se disponía a ir a la entrada para ver qué estaba sucediendo, vio a unos policías haciendo guardia. Por ello, no tuvo más opción que llamar a un taxi al lado de la carretera y luego abrió una aplicación en su teléfono.
Él sabía que Madeline siempre llevaba la pulsera de cristal que le había hecho su hijo y que el GPS de la pulsera nunca fallaba.
Al final, Jeremy se dio cuenta de que estaban llevando a Madeline a un hospital cercano. No sabía qué le pasaba a Madeline, pero el sonido del disparo de antes era como si hubiera penetrado en su corazón. Le estaba causando un dolor insoportable.
Combinado con la influencia del veneno y la lluvia, Jeremy sintió que no podía aguantar más.
Sin embargo, cuando vio el anillo en su dedo anular, se llenó de energía una vez más.
"Linnie...".
Después de que Madeline fuera tratada, fue enviada a la sala. Por suerte, la bala solo le rozó el brazo y ya estaba despierta.
Sin embargo, había perdido demasiada sangre recientemente y eso la hacía estar adormecida. No podía hacer ningún esfuerzo aunque quisiera.
Ryan estaba de pie al lado de la cama mirando a Madeline, que tenía una expresión helada en su rostro.
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