Resumo do capítulo Capítulo 1235 de Esposa Pecadora
Neste capítulo de destaque do romance Romántica Esposa Pecadora, Sixteenth Child apresenta novos desafios, emoções intensas e avanços na história que prendem o leitor do início ao fim.
El tiempo pareció congelarse en el momento en que la niña dijo esa palabra.
Madeline y Jeremy se quedaron atónitos al mismo tiempo. No podían creer lo que estaban escuchando en ese momento.
Jeremy incluso se preguntó si estaba alucinando. ¿Su pequeña princesa lo acababa de llamar "papito"?
Sin embargo, Lillian se sentía confundida. En ese momento, lo que vio fue a su padre ignorándola. Sus grandes ojos miraban al inmóvil Jeremy mientras sus gruesas pestañas se agitaban ligeramente. Entonces, un rastro de soledad apareció en sus ojos claros.
"Papito", volvió a decir Lillian luego de abrir la boca.
El tierno e infantil "papito" penetró claramente en los oídos de Jeremy.
En ese momento, estaba seguro de que no había escuchado mal.
No estaba alucinando.
De repente, Jeremy se puso en cuclillas y miró a la pequeña con cara de muñeca que tenía delante. Sus ojos estaban llenos de lágrimas.
"Lily".
Levantó sus manos y acarició suavemente el pequeño rostro de Lillian.
"Lily, puedes hablar. Ya puedes llamar a papito".
Su corazón comenzó a acelerarse mientras su voz empezaba a temblar.
¡Su pequeña podía volver a hablar!
¡Había esperado tantos años a que la niña le llamara "papito"!
Cuando Lillian sintió que Jeremy la aceptaba, una dulce sonrisa apareció en su rostro de muñeca.
Sin embargo, no entendía por qué los ojos de su papito estaban rojos.
‘¿Papá está llorando?’.
‘¿Por qué?’.
"Lily, ven a casa con mamita. Papito está ocupado ahora y no puede jugar contigo". Madeline cargó a Lillian en sus brazos.
Lillian apretó fuertemente su pequeña boca y observó a Jeremy mientras se alejaba. Muchas lágrimas de dolor empezaron a caer de los ojos de Lillian.
"Lily, no llores", la consoló Madeline, pero sus ojos empezaron a llenarse de lágrimas también.
Ambas miraban la espalda de Jeremy. Y en ese momento, Madeline también empezó a sollozar.
‘Jeremy, espérame un poco más’.
‘Haré que todos sepan quién es el verdadero asesino de Lana’.
Madeline le prometió en secreto y se fue con Lillian.
Sin embargo, Lillian seguía llorando. Madeline la consoló pacientemente e intentó convencer a la niña de que volviera a hablar.
Sin embargo, la niña no emitió ningún sonido por mucho que Madeline le insistiera.
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