Esposa Pecadora romance Capítulo 1288

"¿Mmm? ¿Sigue vivo después de perder tanta sangre? Qué cuerpo tan extraordinario tiene". Las palabras de Ryan estaban llenas de sarcasmo.

La respiración de Madeline se volvió errática.

¿Jeremy perdió mucha sangre?

¿Cómo pudo haber pasado eso?

"Ahora que lo pienso, sigue estando bien incluso después de haber sido atormentado por el veneno durante tanto tiempo. Ja. Jeremy Whitman sí que tiene mucha determinación". La voz de Ryan se acercó. "Pero ¿y qué si es resistente y de carácter fuerte? Mientras Eveline Montgomery esté a mi lado, nunca vivirá su vida en paz".

¡Ryan Jones!

Madeline apretó la mandíbula mientras crecía su odio por ese hombre horrible e intrigante.

Sin embargo, ¿qué le pasó a Jeremy? ¿Por qué perdió tanta sangre?

Madeline estaba preocupada. Casualmente, oyó a Ryan preguntar a la otra persona en la línea: "¿En qué hospital está Jeremy? ¿En el Kindred? Muy bien".

Entonces, Madeline oyó los pasos de Ryan acercándose a la puerta.

No se demoró más y caminó hacia la escalera donde vio a Sean.

"Papá". Madeline levantó la voz intencionadamente para que Ryan supusiera que estaba a punto de bajar las escaleras.

"¿Ya te has levantado, Eveline? ¿No vas a descansar en la cama un poco más?".

Madeline miró a Ryan por el rabillo del ojo mientras él se acercaba a ella. "Se me hizo un poco pesado estar en la cama estos días. Esperaba dar un paseo para tomar aire fresco".

"¿Quieres salir de la casa?". Ryan se acercó lentamente.

Madeline se dio la vuelta con fingida sorpresa. Fingió que acababa de darse cuenta de la presencia de Ryan. "Sí. Quiero dar un paseo fuera, pero no sabía si me dejarías salir o no".

"¿Por qué no? ¿Por qué el Señor Jones te impediría dar un paseo fuera? Solo está preocupado por ti". Sin saber qué clase de persona era Ryan, Sean defendió al hombre.

A Madeline no le sorprendió que Ryan le hubiera pedido a alguien que la vigilara. Subió al coche y empezó a teclear en el teléfono despreocupadamente.

"¿Hay algún lugar al que le gustaría ir, señora?", le preguntó el conductor.

"¿Hay un parque de cerezos en flor cerca?", preguntó Madeline sin pensarlo mucho.

El conductor asintió. "¿Le gustaría ir al parque de los cerezos en flor, señora?".

"Claro".

"De acuerdo". El conductor se dirigió al lugar sin sospechar nada.

Madeline charló con Eloise y Sean mientras observaba cómo cambiaba el paisaje fuera de la ventanilla del coche. Cuando un edificio concreto apareció ante sus ojos, la expresión de Madeline cambió drásticamente a una de inmensa agonía.

Sean se dio cuenta del cambio en la expresión de Madeline. "¿Qué pasa, Eveline?".