Esposa Pecadora romance Capítulo 1365

La Señora Jones estaba sensible. Extendió la mano para intentar tirar de Madeline de nuevo, pero esta vez, Jeremy no le dio a la Señora Jones la oportunidad de tocar a Madeline.

Tiró de Madeline para meterla en sus brazos y se enfrentó a la Señora Jones con una expresión gélida.

"¿Por qué? ¿Intentas abandonar a tu benefactor al conseguir tu objetivo? Habla con propiedad", dijo con frialdad.

La Señora Jones tenía un poco de miedo de Jeremy y no se atrevió a responderle. Sin embargo, empezó a interrogar de nuevo a Madeline después de ver la emergencia en la sala de cuidados intensivos.

"Eveline, estuviste allí mucho tiempo. ¿Qué le dijiste a Rye? ¿Dijiste deliberadamente algo que Rye no quería oír para estimularlo y por eso está empeorando ahora? Si no, ¿por qué los médicos están dando los primeros auxilios a Rye con tanta prisa?".

"¡Eveline, no esperaba que fueras tan insidiosa!", criticó también el Señor Jones siguiendo el ejemplo de su esposa.

Jeremy amaba ardientemente a su esposa, así que ¿cómo podía permitir que el Señor y la Señora Jones atacaran así a Madeline?

Sin embargo, cuando estaba a punto de hablar, Madeline le tomó la mano. "Jeremy".

Lo miró con una sonrisa y negó ligeramente con la cabeza.

"No hay necesidad de discutir con ellos. He hecho lo que debía hacer, en cuanto al resultado...".

Madeline miró a la habitación. ‘Ryan, debes querer saber lo que quiero decirte, así que querrás despertarte’.

"Eveline, ¿qué quieres decir con eso? Te rogué que entraras a animar a Rye, ¿de qué hablas ahora? Si resulta que Rye sigue sin querer vivir, ¿de qué me sirvió dejarte entrar?", reprendió la Señora Jones y luego sonrió amargamente en señal de autodesprecio.

"¡Debió haber algo malo en mí cuando te rogué que entraras a animar a Rye! ¿Cómo pude olvidar que ninguno de los Whitman tiene buen corazón? ¡Incluida tú! ¡Solo quieres que Rye muera!".

"¡Basta!", interrumpió con frialdad Jeremy, sus encantadores ojos estaban llenos de corrientes frías.

"Mi mayor límite es permitir que mi esposa entre. ¡Ryan debería haber sido condenado!".

"Tú...". La Señora Jones no podía soportar esto, pero sabía que no podía competir con Jeremy. Por lo tanto, comenzó a apuntar a Madeline de nuevo. "Eveline, si Rye es realmente provocado por ti y no puede ser salvado, ¡te haré pagar con tu vida!".

¡Crac!

El Señor y la Señora Jones no tenían nada que decir. Las reprimendas y maldiciones que soltaron un momento atrás volvieron a caerles en la cara. Se sentían como si hubieran recibido numerosas bofetadas y se sentían avergonzados.

"¿C-cómo está mi hijo ahora? ¿Está bien ahora?", preguntó la Señora Jones con cuidado mientras le echaba un vistazo a Madeline. "¿Qué le dijo ella a mi hijo hace un momento? ¿Realmente funcionó?".

El médico no pudo soportar la actitud dubitativa de la Señora Jones. Por ello, le respondió con severidad: "Le he dicho claramente hace un momento que si sigue pensando que estamos perjudicando a su hijo, ya no tenemos nada que decir al respecto."

“...”.

El médico no quiso dar más explicaciones, así que se dio la vuelta y se fue.

"Jeremy, nosotros también deberíamos irnos". Madeline agarró la mano de Jeremy. No quería quedarse allí más tiempo.

Antes de que salieran de la casa, ella quería acompañar a Jeremy al hospital porque sentía que podía hacer algo.

Ciertamente, después de decirle esas palabras a Ryan, sintió como si se hubiera quitado una roca invisible que aplastaba su corazón.