Resumo do capítulo Capítulo 1440 do livro Esposa Pecadora de Sixteenth Child
Descubra os acontecimentos mais importantes de Capítulo 1440, um capítulo repleto de surpresas no consagrado romance Esposa Pecadora. Com a escrita envolvente de Sixteenth Child, esta obra-prima do gênero Romántica continua a emocionar e surpreender a cada página.
Ryan se acercó a Madeline. El brillo del atardecer iluminaba silenciosamente su rostro, pero su expresión parecía algo oscura y poco clara.
"Eveline, no volveré a hacerte daño, pero no dejaré que vuelvas al lado de Jeremy".
Madeline escuchó su comentario y dejó escapar tranquilamente una sonrisa. "En aquel entonces, me dijiste que nunca dejarías que Jeremy y yo nos volviéramos a reunir, pero te equivocaste y volví a reunirme con él. ¿Y qué si ahora me atrapas aquí? Pronto, volveré a estar a su lado. Y si crees que la mujer que has contratado será capaz de conseguir lo que desea, ¡entonces puedes olvidarte de ello!".
Ella escupió esos comentarios decididos y seguros, y luego giró elegantemente para marcharse.
Ryan no estaba contento y frunció el ceño. Lentamente, apretó su mano que estaba escondida en su bolsillo en un puño.
Mirando el vasto mar, Ryan sintió que el mar dentro de su corazón se hacía más pequeño.
...
En la Mansión Whitman.
Cuando llegó la noche, la familia cenó felizmente.
La mujer que se hacía pasar por Madeline mostraba una sonrisa falsa en su rostro mientras ayudaba a Lillian y Jackson con sus tareas. Se mostró entusiasmada cuando fue a poner a dormir al más pequeño. Sin embargo, en cuanto cargó a Pudín, el niño empezó a llorar a gritos.
Antes de hacerse pasar por Madeline, la mujer ya había investigado y estaba bien preparada, independientemente de su actitud o su voz. Incluso la fragancia especial que llevaba Madeline, se las arregló para encontrar un perfume similar para esconderse. Sin embargo, no se esperaba que el pequeño infante fuera tan sensible.
"¿Por qué lloras, Pudín? ¿No te gusta que te ponga a dormir?". Karen se hizo cargo de Pudín y lo sostuvo en sus brazos. "Eveline, será mejor que vayas a descansar. Yo dormiré a Pudín".
"Gracias, mamá. De hecho, últimamente me siento un poco cansada", dijo la mujer, poniendo una mirada aletargada mientras miraba a Jeremy. "Jeremy, volvamos a nuestra habitación y durmamos temprano esta noche".
Jeremy miró fijamente al par de ojos grandes que miraban de lado a lado y asintió suavemente.
Jeremy cubrió a su hijo con la manta y solo entonces se marchó.
Cuando volvió a su dormitorio, Jeremy escuchó el sonido de alguien bañándose que venía del baño. Él se dirigió a la cama y se sentó pensativo. Inconscientemente, agarró el marco de fotos que estaba colocado en la mesilla de noche.
El marco de fotos contenía la foto de la boda de él y Madeline de unos años atrás.
En esa foto, Madeline estaba agarrada a su brazo mientras sonreía tímidamente. Sus grandes ojos, que parecían estrellas, brillaban de felicidad.
Aquel año, ella era una joven inocente.
Sin embargo, él no la apreció cuando ella estaba en la etapa más feliz de su vida.
En el fondo del corazón de Jeremy, él se culpaba a sí mismo. Se obligó a deshacerse de ese pensamiento. Justo cuando estaba a punto de levantarse, escuchó unos pasos que venían de detrás de él y la voz extraordinariamente gentil de una mujer. "Jeremy".
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