Esposa Pecadora romance Capítulo 1520

Naomi se sujetó las mejillas que aún le dolían por las bofetadas. Sentía que no podía seguir así.

Madeline estaba peleando prácticamente de frente contra ella. Lo que más la incomodaba y extrañaba era la actitud de Jeremy.

Era obvio que él favorecía más a Madeline.

'¿Habrá descubierto algo?'.

Naomi empezó a entrar en pánico.

...

Madeline regresó a la habitación de los niños. Después de deshacerse de todo su descontento, sonrió y acompañó a Lillian y Jackson con un toque de dulzura y amabilidad en sus ojos. Finalmente, abandonó sus habitaciones después de haberlos puesto a dormir.

Fue a buscar a Eloise. Después de ver que Eloise dormía profundamente, volvió a su habitación sintiéndose aliviada.

Después de ducharse, Madeline se quitó el maquillaje de la cara. Las marcas rojas volvieron a aparecer en el espejo.

Efectivamente, era tal y como dijo Adam. Las marcas rojas no se desvanecerán tan fácilmente.

Los efectos del gel eran como los de una mascarilla con resultados rápidos. Los efectos después de ser absorbidos por la piel eran sólo temporales.

Madeline suspiró decepcionada y frustrada. Se puso la máscara para regresar a su habitación y, casualmente, vio a Jeremy caminando hacia ella.

"Tengo mucho trabajo que hacer hoy. Haces una buena taza de café, así que ¿podrías prepararme un café y reorganizar mis documentos como la última vez?", pidió Jeremy.

Madeline sujetó su ropa desgastada y dudó antes de asentir.

"Por supuesto".

Jeremy sonrió. "Estaré pendiente de tu llegada".

'Al menos no me ignoras como si fuese una extraña. Incluso te preocupas por mis emociones y me proteges desde todos los ángulos'.

Madeline pensó en esto y esbozó una sonrisa sin darse cuenta.

El tiempo pasó silenciosamente, y antes de darse cuenta, ya estaban en medio de la noche.

Madeline abrió los ojos y se dio cuenta de que se había quedado dormida en el sofá sin darse cuenta. Incluso había una manta sobre ella. Ella levantó la cabeza y vio a Jeremy durmiendo en la silla.

Ella se levantó rápidamente y agarró la manta para caminar de puntillas hacia donde estaba Jeremy. Le colocó la manta encima.

Ella pensó que sería capaz de dejarlo dormir así, pero al ver la tenue melancolía y el agotamiento en el entrecejo del hombre, Madeline no pudo evitarlo y levantó su dedo para acariciar las cejas de él.

Sin embargo, el hombre que dormía abrió sus ojos de repente.