Esposa Pecadora romance Capítulo 1681

La promesa de Jeremy de repente dio sentido a la vida de Felipe en la cárcel.

Si había algo o alguien de lo que Felipe no pudiera separarse, esa era Cathy.

Si se le pudiera conceder algún otro deseo improbable, sería poder volver a ver a los dos niños.

A los niños.

Al pensar en ellos, Felipe sentía una gran calidez.

Cuando era el amor de la vida de Cathy, no solo la había ignorado, sino que había matado a esos dos niños con sus propias manos.

Él sabía que ya no podría compensar a Cathy, pero tampoco se esperó que ella estuviera embarazada de él cuando el accidente sucedió.

Esto fue un regalo de Dios. Sí, era un regalo de Dios para él.

En ese momento, esperaba que Jeremy pudiera organizar la llegada de ese día lo antes posible.

Cuando se fueron, Madeline se quedó con Adam. Pasaron unos días, y el veneno de su cuerpo no se recrudeció, pero ella no se olvidó del dolor insoportable que había sentido cuando ocurrió.

Mientras estaba sentada en el alféizar de la ventana, disfrutando del escaso y cálido sol de invierno, su atención se centró en el pequeño tubo de reactivo antitoxinas que tenía en la palma de la mano.

Cuando reflexionó sobre la relación entre Carter y Shirley, Madeline por fin se dio cuenta del momento exacto en que la habían envenenado.

Fue aquella noche en la que Carter había accedido de buena gana a cancelar el acuerdo matrimonial. El vaso de vino tinto que él le había servido seguramente contenía algo raro.

"Todavía me acuerdo de aquella vez cuando estaba en quinto grado en la que me escapé de clase para ir a cazar ranas en un charco con algunos de mis compañeros y ella nos vio por casualidad. Cuando estaba a punto de llevarme a la escuela, mis padres, quienes estaban regresando del trabajo, nos vieron".

"Para evitar que me regañaran, ella dijo que había sido ella la que me había incitado a faltar a clase. Incluso después de que mis padres la castigaran haciéndole copiar un libro de medicina de 70 000 palabras, fue a consolarme diciéndome que todo estaba bien".

Mientras Adam hablaba, sus ojos empezaron a llenarse de lágrimas.

"Fue una buena hermana en el pasado, ¿no crees?", le preguntó Adam a Madeline. Como la Shirley actual le había dado una impresión diferente, él quería escuchar a otras personas darle la razón sobre Shirley.

Madeline se levantó lentamente. "Quizás antes era una buena hermana. Sin embargo, desde que se escapó de casa y dejó la familia, creo que ya no es la hermana que conocías".

"Lo siento", dijo Adam con remordimiento. "Por fin entiendo qué tipo de persona podría desarrollar este tipo de veneno. Si fue Shirley, no me sorprende en absoluto. Siempre ha sido muy hábil en ese aspecto desde que era joven".