Esposa Pecadora romance Capítulo 1894

“Si es para ti, volverá a ti eventualmente. Si no es para ti, será inútil forzarlo”.

La afirmación de Camille atenuó al instante la luz dominante en los ojos de Carter.

“Déjala ir. Nosotros también deberíamos regresar”.

Cuando Carter escuchó lo que Camille dijo, miró hacia la dirección en la que Shirley se había ido. Sus ojos perdieron gradualmente el enfoque.

…

Según el deseo de Shirley, Madeline y Jeremy llevaron a Shirley de vuelta a donde Adam solía vivir.

Era la casa que sus padres les habían dejado.

Después de entrar en la casa, colocaron a Shirley en la habitación que había utilizado anteriormente.

En ese entonces, solo tres personas vivían en aquella casa, por lo que no había sido un lugar animado.

Sin embargo, en comparación con antes, esta casa le parecía a Shirley anormalmente fría y triste.

Madeline pensó que Shirley, en su estado actual, debería tener a alguien que la cuidara, pero Shirley rechazó la amabilidad de Madeline.

No quería que nadie la cuidara. Quería dejar que su vida siguiera su curso natural por el resto de su miserable vida.

Sintiendo el pesimismo de Shirley, Madeline lo pensó un poco y luego le aconsejó: “Adam y Cathy no habrían querido verte así. No hagas nada que dañe tu cuerpo. Esto solo molestaría a las personas que se preocupan por ti”.

Los ojos de Shirley se enrojecieron. Ella soltó una risa amarga. “Ya no hay nadie en este mundo que se preocupe por mí”.

Ella miró a los ojos de Madeline mientras hablaba.

“¿Recibiste los reactivos antitoxina? Solo tienes que seguir las instrucciones de la caja y el veneno en el cuerpo de Jeremy será completamente eliminado. Esto es lo último que puedo hacer para arrepentirme de mis pecados”.

“Gracias, quiero quedarme aquí sola”.

Madeline miró al hombre que tenía delante y suspiró con pesar. “Ha pasado tanto tiempo. Incluso me he acostumbrado a como te ves ahora. El color de tus pupilas es ciertamente muy bonito, pero por muy bonito que parezca, no se puede comparar con un cuerpo sano”.

Al escuchar esto, Jeremy sonrió con dulzura y atrajo a Madeline hacia sus brazos, luego dijo en broma: “Eso es sencillo. Pediré unas lentillas de color ámbar y las llevaré todos los días por ti”.

Madeline se rio al escuchar esto. Esta era una de las raras oportunidades en las que podía burlarse de Jeremy. “No quiero eso. Quiero a mi marido original de antes”.

“Entendido. Definitivamente escucharé a mi esposa y volveré rápidamente a cómo era antes”.

Jeremy le siguió la corriente a Madeline y la abrazó con más afecto.

En otro lugar, Carter volvió a la villa y decidió no salir durante mucho tiempo.

Se dirigió al dormitorio en el que se había quedado Shirley. Se quedó allí un rato antes de dirigirse al lado de la cama para sentarse. Levantó la mano para tocar la almohada sobre la que había dormido Shirley.

Sin embargo, cuando bajó la vista, para su sorpresa, notó que parecía haber un libro debajo de la almohada de Shirley.