Esposa Pecadora romance Capítulo 1900

Madeline tenía razón. Uno debía cargar con la responsabilidad de su camino elegido.

La razón por la que Shirley terminó como lo hizo fue por su karma. Esto no tenía nada que ver con los demás.

Si ella realmente quería encontrar a alguien que cargara con la responsabilidad, esta persona tendría que ser Carter.

Villa Gray.

Camille sabía que Carter llevó a Shirley de vuelta otra vez. Después de pensarlo, ella decidió ir a hablar con Shirley.

Al principio, Shirley tenía hambre y sed. Después de ser llevada a esa casa de nuevo por Carter, perdió el apetito, así que simplemente se quedó acostada en la cama, mirando perdidamente al techo.

Camille llevaba a la habitación la sopa de nido de pájaro que acababa de preparar. Cuando vio a Shirley mirando al techo sin moverse, no pudo evitar fruncir el ceño.

"Sé que te sientes fatal ahora mismo y que culpas a Carter, pero no hay necesidad de castigar a tu cuerpo".

Mientras hablaba, Camille le llevó la sopa y le pidió a las sirvientas que ayudaran a Shirley a levantarse.

Sin embargo, cuando las sirvientas extendieron sus manos, Shirley movió la cara para evitar a las sirvientas.

"Gracias por su amabilidad, pero realmente no tengo nada de apetito".

Shirley dijo débilmente y giró la cabeza para mirar a Camille.

"Espero que puedas llevarme a casa. No quiero quedarme aquí y no quiero volver a verlo".

Camille suspiró al escuchar eso. "Ya conoces el carácter de Carter. Se conocen por más de diez años. Si hay algo que él quiere hacer, nadie puede impedir que lo logre".

Cuando Shirley escuchó eso, dijo débilmente: "Él siempre respeta tus deseos".

"Sí, me respeta. Pero ¿crees que puede afrontar esta situación de forma razonable?".

"Hoy en día, la medicina se está volviendo cada vez más avanzada. Tus heridas pueden ser tratadas, pero antes de eso, necesitas tener las ganas de vivir".

"Ganas...".

Shirley repitió esta palabra entre dientes, y las lágrimas comenzaron a caer de sus ojos sin que se diera cuenta.

"Ya no tengo ganas de vivir".

La luz de los ojos de Shirley se apagó, y sus ojos tenían una mirada tan fría como su corazón.

"Pensando que mis padres no me amaban, abandoné obstinadamente la escuela en la que me inscribieron y elegí vagar por las calles. Ni siquiera lloré cuando murieron en ese accidente”.

"Muchos años después, maté al único familiar que tengo en este mundo y a esa niña amable e inocente porque soy una hermana desconsiderada. ¿Qué derecho tengo a seguir viviendo?".

"Entonces, por eso, ¿crees que puedes renunciar a tu propia carne y sangre?".