Esposa Pecadora romance Capítulo 1980

'¿Estás tan decepcionada de mí que no quieres preocuparte por esto?'.

Innumerables preguntas aparecieron en el corazón de Jeremy. Estaba tan confundido que le dolía.

Madeline, que parecía saber lo que Jeremy estaba pensando, sonrió y tomó la mano ligeramente rígida de Jeremy.

"Estaría mintiendo si dijera que no me importa, pero esto no es tu culpa. Carter fue el que hizo esto deliberadamente. Su objetivo era causar un malentendido entre nosotros, pero no dejaré que consiga lo que quiere".

El corazón de Madeline estaba claro.

"Jeremy, hemos pasado por muchas cosas a lo largo de este camino, y ha sido muy difícil. Es imposible para mí no sentir los sentimientos que tienes por mí hasta el día de hoy. Y por eso no quiero dejar que otras personas influyan en nosotros. Deja que el tiempo se lleve esos recuerdos tristes, ¿de acuerdo?".

Después de escuchar lo que Madeline había dicho, Jeremy se sintió ligeramente conmovido.

Su Linnie lo comprendía y, en lugar de culparlo, lo estaba consolando.

Jeremy, sin embargo, se culpó aún más después de eso. Al mismo tiempo, también le dolía el corazón por Madeline.

A pesar de todo, también sabía que tenían que dejar pasar este asunto. Aunque no podía ser tan optimista, no quería que esto afectara a su relación con Madeline.

Fue extremadamente difícil y desafiante para ellos llegar a donde estaban ese día después de todo lo que pasaron.

Después de un largo rato, Jeremy miró a los ojos de Madeline y asintió.

"De acuerdo".

"De acuerdo". Madeline dio palmaditas en la mano de Jeremy. "Muy bien, deberías ir a jugar con tu hijo. Yo tengo que ir a la oficina".

"¿Por qué?".

"He perdido mucho tiempo en San Piaf. Todavía no he terminado el perfume personalizado del cliente del otro día. Estaré incumpliendo el contrato si sigo sin terminarlo".

Madeline sonrió. Antes de darse la vuelta, se inclinó y plantó un suave beso en la mejilla de Jeremy. "Cuida bien de nuestro hijo y espera a que vuelva a casa".

El corazón de Jeremy se aceleró al ver la encantadora sonrisa de Madeline.

Coco negó con la cabeza. "No lo es. Sonaba como si ella tuviera algunas cosas importantes que decirle al señor Whitman".

"Entendido. Voy a echar un vistazo ahora". Madeline no tuvo tiempo de quitarse la bata mientras se dirigía a la sala de recepción.

De camino a la sala de recepción, Madeline se sintió muy nerviosa. Era como si una voz en su subconsciente le dijera que algo iba a pasar.

En el momento en que Madeline entró en la sala y vio a la mujer que la esperaba en el sofá, supo por fin lo que su nerviosa y asustada intuición intentaba decirle.

Cuando la mujer del sofá vio a Madeline, se levantó bruscamente. "¿Eveline? Eres tú".

Madeline observó la expresión insatisfecha de la mujer y curvó las comisuras de los labios para esbozar una sonrisa tranquila. "Soy yo. Me he enterado de que ha venido a buscar a mi esposo. Lo siento, mi esposo está cuidando a los niños en casa. Puedes decirme si tienes algo que decir".

Tras decir esto, Madeline miró a Coco.

"Coco, por favor, prepara una taza de café para ella. Tengo algo que discutir con ella".

"¡Espera!".