Esposa Pecadora romance Capítulo 2161

Aunque estaba un poco lejos, Ava podía escuchar al señor Rogers elogiando el diseño.

“Señorita Pine, su estilo se refleja en su diseño. No esperaba que fuera usted una principiante”. El señor Rogers elogió a Laura antes de elogiar a Bill. “Bill, eres muy exigente. Es una bendición para tu empresa tener una diseñadora tan impresionante”.

Laura sonrió con dulzura y dio una respuesta igualmente dulce: “Señor Rogers, es usted muy amable. Solo lo he diseñado de acuerdo con sus requisitos. Si hablamos de quién tiene más visión, es usted porque ha elegido a esta empresa para ofrecerle sus servicios”.

El señor Rogers se rio alegremente al escuchar esto.

Ava mordió la manzana y escuchó con calma. También se sintió aliviada de que el proyecto estuviera arreglado.

Si el señor Rogers no hubiera estado satisfecho, entonces es posible que ella hubiera tenido que pagar la penalización por la pérdida de un contrato.

“Ava, ¿has escuchado eso? No esperaba que Laura fuera tan asombrosa como para realmente encargarse de este proyecto”. Maisie, una compañera, se acercó a comentarle a Ava.

“Si es así, Bill definitivamente la volverá a utilizar. Ava, ¿tienes miedo de que tu puesto sea ocupado por ella?”.

Ava sonrió y dio un mordisco a la manzana. “Para ser honesta, estoy muy agradecida con Laura. Si este proyecto se hubiera perdido, yo tendría que pagar una gran cantidad en compensación de daños y perjuicios. Como ella lo ha completado, todos están contentos. Le llevaré una taza de café para agradecérselo luego”.

Cuando Ava terminó de hablar, se dio la vuelta y levantó su teléfono para pedir el café. Entonces, vio a Laura y Bill riendo mientras acompañaban al señor Rogers fuera de la oficina. Al volver, Bill seguía elogiando a Laura. Ni siquiera miró a Ava, quien llevaba años en la empresa con él.

A Ava tampoco le importaba, ya que siempre habían personas con más talento. No se sentía celosa.

Después de una media hora, llegó el café que Ava había pedido.

No solo pidió una taza. También compró generosamente café para todos en la oficina.

“Ava, eres muy generosa. Mi vida vale la pena ahora que tengo una compañera como tú”, bromeó la compañera junto a Ava mientras sostenía el café en su mano.

Ava apartó la mano. Sabía que tocar las cosas de otras personas sin permiso era de mala educación, pero aquel boceto debajo del libro la confundía.

“No es nada. He comprado café para todos y quería aprovechar la oportunidad para felicitarte por haber completado el proyecto exitosamente con el señor Rogers”, explicó Ava.

Laura pareció sonreír al escuchar eso. Luego se apresuró a su escritorio para fingir que ordenaba las cosas que habían en él y dijo: “Ya veo. Gracias por el café, Ava. El señor Branson quiere verme, así que voy para allá”.

Después de decir eso, Laura agarró los documentos y papeles desordenados de su escritorio antes de darse la vuelta para entrar en la oficina de Bill.

Ava se quedó en el mismo sitio mientras miraba la espalda de Laura y frunció las cejas.

Cuando Maisie vio a Laura entrar a la oficina de Bill, se acercó a Ava.