Esposa Pecadora romance Capítulo 2186

“Oh, es una bendición para nosotros que Dan pueda casarse con una chica tan buena como tú, Naya”. La madre de Daniel no dejaba de elogiar a Naya, aparentemente olvidando el hombre excelente y excepcional que era su propio hijo.

Mientras escuchaba los elogios de sus familiares y amigos, Naya bajó la mirada tímidamente antes de volver a levantarla.

“Señora Graham, habla usted demasiado bien de mí. No soy tan buena como ha dicho. Soy muy afortunada de casarme con Dan”.

“Escuchen lo humilde que es Naya”. La madre de Daniel volvió a elogiarla. “Tener una nuera bien educada y sensata como tú es una bendición para los Graham”.

Naya se sonrojó tímidamente al escuchar esto.

El rostro de la madre de Naya también estaba lleno de arrogancia y engreimiento. “Naya, vivirás una buena vida con Dan en el futuro. Ahora que están comprometidos, es como si ya fueran marido y mujer. Si vuelves a ver a Ava, deberías decirle que eres la nuera de los Graham. Dile que sepa cuál es su lugar y que se aleje lo más posible”.

“Mamá, ¿no es eso un poco cruel?”. Naya frunció el ceño, pensativa. “Además, Dan cree que él y yo solo estamos fingiendo esto”.

“¿Qué tiene de cruel? Siempre estuviste destinada a ser la nuera de los Graham”, enfatizó en un tono serio la madre de Naya. “Dan es el único que piensa que este es un compromiso falso. ¡Todos los demás sabemos que este compromiso es real!”.

Después de escuchar lo que dijo su madre, el rostro de Naya se llenó al instante de confianza y autosatisfacción. La victoria y la alegría se reflejaron en sus ojos.

“Habiendo dicho tanto, ¿por qué aún no ha llegado Dan?”.

“Voy a echar un vistazo afuera”, dijo la madre de Daniel y se dispuso a salir.

El corazón de Ava ya estaba helado después de escuchar lo que dijeron las personas presentes.

Cuando se dio la vuelta para marcharse, de pronto una palma le agarró la mano.

“Sí”. Maisie asintió sin pensarlo. “Me agradas más que ella y también he escuchado su conversación en el bar hace un momento. ¡Son tan detestables! Ava, no te preocupes. ¡No dejaré que sufras en silencio!”.

Maisie apretó el puño. Estaba furiosa.

Ava sabía que Maisie era una persona muy directa por el incidente anterior. También le gustaba defender la justicia, así que, obviamente, estaba a punto de salir en defensa de Ava.

Cuando Ava aún estaba pensando en esto, Maisie abrió de un tirón la puerta metálica de la escalera de emergencia y salió disparada y furiosa.

“Maisie, ¿qué vas a hacer?”.

“¡Voy a hacer que se te haga justicia! Además, ¡quiero que todos vean las verdaderas caras de los Graham y los Méndez!”.