Esposa Pecadora romance Capítulo 2331

Ava se detuvo un momento. Inmediatamente comprendió lo que Tom tenía en mente.

Dejó escapar un suspiro melancólico y una sonrisa irónica apareció en la comisura de su boca.

"Mis padres me abandonaron cuando era muy pequeña, pero recientemente, me encontraron, ha sido uno tras otro".

Después de que Ava dijera esto, llegaron casualmente a una luz roja.

El coche se detuvo. Tom miró a Ava con ligero asombro y arrepentimiento en sus ojos.

"Si esto es cierto, realmente me cuesta creer que una persona con tanto talento como el Doctor Long cometiera un error tan grave cuando era joven. ¿Podría ser un malentendido?".

"No lo creo". Ava lo negó. "Les pregunté en persona si me habían abandonado por voluntad propia en aquel entonces y lo admitieron".

Después de escuchar la respuesta de Ava, los ojos de Tom se llenaron de incertidumbre.

"Quizás a veces lo que vemos con nuestros propios ojos no es la verdad completa".

"Pero es un hecho que no quisieron quedarse conmigo".

Después de escuchar a Ava, Tom no supo qué más decir.

Dejó de mencionar el tema para evitar que Ava se sintiera incómoda.

Alrededor de media hora después, Tom la llevó a la puerta de la Vieja Mansión Whitman según la dirección que le había dado Ava.

Originalmente, Madeline había planeado ir a recoger a Ava, pero ella le había enviado un mensaje hace media hora diciendo que alguien la llevaría de vuelta. Por lo tanto, Madeline fue directamente a su casa.

En ese momento, Madeline se quedó un poco desconcertada cuando vio a Tom salir del coche y abrirle la puerta a Ava con tanta atención.

"El Señor Lowe me acaba de decir que a su padre siempre le aquejaba un dolor de cabeza persistente, pero que se curó después de verlo a él. Tal vez pueda beneficiarme del parentesco que tengo con él y pueda ayudarme como palanca".

"Ya veo". Madeline se mostró apenada.

Ava quería decir algo más, pero, de repente, Pudín apareció frente a ella. Una sonrisa apareció en su rostro inmediatamente, y, al instante, se acercó a Pudín para cargarlo.

Madeline sonrió y también quiso acercarse, pero Jeremy apareció de repente junto a ella y la detuvo.

"Linnie".

"Jeremy, ¿cuándo regresaste?".

"Acabo de estacionar el coche". Después de decir esto, Jeremy sacó una tarjeta de invitación rosada de su bolsillo. "Linnie, mira que es esto".