Esposa Pecadora romance Capítulo 2361

La madre de Daniel se congeló por la sorpresa. "Dan, ¿de qué estás hablando? ¿Crees que Naya se estrelló deliberadamente contra ese coche para suicidarse y así ganarse tu simpatía?".

"Ella no quería ganarse mi simpatía. Quería matar a la persona que iba en el otro coche". La expresión de Daniel se tornó más y más solemne. "La persona que me trajo de vuelta hace un momento fue Ava".

"... ¿Qué? ¿Ava?". La madre de Daniel lo miró asombrada, pero, poco a poco, comprendió lo que Daniel quería decir.

El coche que Ava conducía hace un momento era del mismo modelo y del mismo color que el coche que fue golpeado por Naya. Naya debió pensar que Ava conducía ese coche, así que...

"Dan, ¿t-te has equivocado? ¿Cómo podría Naya hacer tal apuesta con su propia vida?".

"Entonces, ¿también crees que ella no habría intentado suicidarse por mí? Ya sabías que podría haber montado un espectáculo cuando afirmó que había intentado suicidarse por sobredosis, ¿no es así?", preguntó Daniel en tono cortante, fijando sus ojos en la evasiva mirada de su madre.

"Mm...". La madre de Daniel no sabía cómo responder a eso.

Daniel no dijo nada más. Se sentía muy inquieto, así que llamó a Ava.

Ava estaba conduciendo hacia su empresa cuando de repente recibió una llamada de Daniel. Por lo tanto, encendió alegremente el audífono Bluetooth.

Después de escuchar la voz de Ava, Daniel se sintió mucho más tranquilo. Cuando supo que Ava se dirigía a la empresa, no le comentó nada sobre el accidente de Naya.

Ava solo pensó que Daniel la echaba de menos y no pensó demasiado en ello.

Condujo hasta una intersección con semáforos. Cuando estaba a punto de despedirse de Daniel y colgar el celular, miró por el espejo retrovisor. Vio a un hombre con ropa negra y gafas de sol que se acercaban rápidamente.

Pensó que ese hombre tenía prisa y que por eso caminaba tan rápido. Sin embargo, una fuerte sensación de inquietud la invadió de repente.

Ava levantó inconscientemente la mano para cerrar la ventanilla del coche, pero en ese momento, el hombre extendió repentinamente la mano y presionó su cuello.

De repente, Ava no podía respirar. Forcejeo con dolor y lanzó un débil grito de auxilio: "¡Déjame ir! Ayuda...".

Con decisión, Daniel se dirigió a la estación de policía, informó a la policía de la situación y le entregó el celular que aún estaba conectado para que pudieran investigar.

La policía inició inmediatamente una investigación. Rastrearon la ubicación del celular de Ava y enviaron inmediatamente a alguien para que lo localizara.

Sin embargo, apenas diez minutos después de que la policía saliera, la llamada se interrumpió de repente. Parecía que la otra parte se había dado cuenta de que el celular seguía en una llamada y había colgado.

De un momento a otro, la policía no pudo localizar a Ava y tuvo que cambiar sus métodos.

En el hospital.

Después de que Naya saliera con esfuerzo de la sala de urgencias, la primera persona que vio al despertar fue su madre.

Aunque ella también estaba herida, no era tan grave. Después de asegurarse de que no había nadie más, Naya le preguntó a su madre con impaciencia: "¿Dónde está Ava? ¿Cuál es el estado de Ava ahora? ¿Está muerta?".