Esposa Pecadora romance Capítulo 257

Su cálido aliento se dispersó en la mejilla de Madeline. Estaba aturdida, y todo lo que Jeremy le hizo en aquel entonces apareció en su cabeza.

Él era de sangre fría y desalmado, así que le había hecho todas las cosas crueles del mundo.

Madeline no podía pensar en nada que él no le hubiera hecho.

Mientras ella se distanciaba, notó que la cara de Jeremy se acercaba a ella.

El corazón de Madeline empezó a acelerarse de forma irregular. Pensó que Jeremy estaba a punto de besarla, así que estaba a punto de salir corriendo cuando él la atrajo hacia sus brazos.

Él bajó la cabeza y enterró su cara entre el cuello y el hombro de ella. Parecía estar agotado. Con este abrazo, estaba liberando toda su presión y estrés desconocidos. Se estaba complaciendo a sí mismo durante este abrazo con ella.

Madeline se quedó sorprendida mientras estaba atrapada en el abrazo de Jeremy.

Ella no llevaba ropa muy gruesa, así que podía sentir el calor de Jeremy a través del material de sus ropas, ya que estaban tan cerca. El calor de él se se filtraba y se extendía en la piel de ella lentamente.

Su aliento también estaba muy cerca de su oído. Su fresco aroma permanecía en su nariz, interrumpiendo su respiración y sus latidos.

Madeline miró la luna y se quedó en trance.

Sin embargo, inmediatamente recordó aquellas cosas siniestras que le hizo.

Su corazón acelerado volvió a la normalidad y ya no pudo encontrar la pasión que sentía por él.

Madeline bajó los ojos y miró al hombre que se apoyaba en su hombro. Luego, lo apartó de un empujón.

Sin embargo, en cuanto se movió, el brazo de Jeremy rodeó su cintura con más fuerza.

"No te muevas", murmuró, "no te haré nada".

"Sr. Whitman, no creo que esto sea apropiado. Soy su futura tía política". Madeline le dejó claro su punto de vista.

Jeremy abrió sus penetrantes pero profundos ojos mientras curvaba sus finos labios. "¿No debería la futura tía política consolar a su sobrino en un momento así?".

“...”

La voz era profunda y encantadora, y se deslizaba por el oído de Madeline de forma muy seductora y atractiva. Madeline sintió que se le calentaba la cara y utilizó todas sus fuerzas para apartar a ese hombre de ella.

Encontró una excusa que le pareció apropiada. Sin embargo, se dio cuenta de que Jeremy la miraba de manera extraña.

"Ahora que está bien, no me quedaré".

Madeline se dio la vuelta después de decir eso. Antes de que pudiera ir más lejos, Jeremy la agarró de la muñeca.

Sus manos estaban frías después de haber sido arrastradas por el viento. Estaban apretadas contra su piel con tanta fuerza, que la extraña sensación penetraba en su piel.

"Vera, tengo una pregunta...".

Ring, ring.

Antes de que Jeremy pudiera terminar de hablar, fue interrumpido por el sonido de su teléfono.

Madeline dejó escapar un suspiro de alivio porque tenía el presentimiento de que la pregunta de Jeremy sería complicada.

No podía revelar todos sus secretos ahora.