Esposa Pecadora romance Capítulo 524

"¿Le gusto?”.

Madeline todavía pensaba que esta razón era absurda.

Incluso si dijera que la amaba, de vez en cuando, la tortura que la había sumido en la oscuridad, en el pasado, seguía viva.

"Te enviaré de vuelta". La voz de Jeremy sonó de repente en sus oídos, y Madeline volvió a sus sentidos.

Ella miró al hombre a su lado, su mirada llena de preguntas.

‘No, Eveline Montgomery. No le creas a este hombre’.

‘Si él hubiera tenido algún rastro de afecto por ti, no estarías albergando un odio tan profundo, hoy’.

Jeremy se dio cuenta de que Madeline lo miraba, de forma un poco extraña. Delirantemente, deseaba que ella todavía tuviera algún apego hacia él.

Era una lástima que una fantasía fuera solo una fantasía, después de todo.

Madeline llamó a un taxi, junto a la carretera, y regresó sola. Jeremy solo se fue, después de mirar desoladamente a Madeline alejarse.

Poco tiempo después de que se fue, una figura entró sigilosamente en el hogar de ancianos.

Esa persona fue directamente a la recepción y anunció: "Soy la nieta del Viejo Señor Whitman, Madeline Crawford. Tengo algo importante que pedirle".

...

Después de regresar a casa, las palabras que el Viejo Maestro Whitman había dicho seguían apareciendo en su mente.

Después de firmar los papeles del divorcio, Madeline no quiso volver a ver a Jeremy, nunca más. Ese día, sin embargo, lo volvió a encontrar para ver al Viejo Maestro Whitman.

Madeline inicialmente pensó que esa persona no había tenido cuidado, pero cuando volvió la cabeza y vio el rostro arrogante de Yvonne, supo que era intencional.

"Mira quién está aquí. ¿Si no es mi prima política desalmada e inhumana?”, Yvonne dijo, con su mirada arrogante. "¿Qué estás haciendo aquí? ¿Quieres ver lo mal que le va a mi primo? ¡Te lo digo, deja de engañarte! ¡Mientras esté al lado de mi primo, definitivamente regresará algún día!".

Madeline no sabía dónde encontraba Yvonne la confianza para decir esas cosas, pero realmente no se molestó en perder el tiempo con Yvonne. Como tal, se inclinó para levantar su teléfono.

Una sonrisa malvada apareció en el rostro de Yvonne, al ver esto. Levantó el pie para patear el cuerpo de Madeline.

Madeline vio el acto insidioso de Yvonne, a través del espejo retrovisor del coche. Cogió su teléfono rápidamente y se retiró a un lado, con flexibilidad.

Yvonne había usado demasiada fuerza y ​​pisó el aire, lo que la hizo caer de cara. "¡Ah!", ella gritó de dolor. “Madeline, p*rra. ¿Cómo te atreves…?".

Ella estalló en maldiciones, pero se detuvo a la mitad de su berrinche. Luego, mostró una expresión de pesar y lástima. “Vera, incluso si odias a tu tía, por intimidarte una vez, tú y yo no guardamos rencor. ¿Cómo pudiste pegarme? Incluso me empujaste al suelo con tanta fuerza".