Esposa Pecadora romance Capítulo 640

Tanner, en pánico, rápidamente trató de pensar en algo mientras caminaba silenciosamente hacia las puertas de hierro.

Él escuchó las voces de Madeline y Jeremy hablando en el interior. Jeremy ya sabía que fue él quien secuestró a Madeline.

"¡MD, realmente sé que lo hice!", Tanner sació su descontento.

Él echó un vistazo a los barriles de gasolina en las puertas, apretó los dientes y negó con la cabeza.

Jeremy encontró la herramienta para abrir la puerta y estaba a punto de actuar cuando Madeline de repente captó un olor extraño con sus agudos sentidos. "Huele a gasolina".

Jeremy se dio la vuelta. "¿Gasolina?".

"Se está volviendo cada vez más intenso". Madeline asintió y de repente vio un resplandor rojo a sus los alrededores. "Alguien ha prendido fuego".

En el momento en que la voz de Madeline se silenció, la lengua de las llamas siguió el camino de la gasolina, y en un instante, ¡se extendió por toda la fábrica abandonada!

No esperaban volver a encontrarse con una situación así.

Jeremy tomó tranquilamente la herramienta y golpeó la puerta. "Linnie, no tengas miedo. Definitivamente te sacaré de aquí".

Él prometió, rompiendo la cerradura de la puerta con más fuerza.

Madeline miró la mirada de preocupación que tiñó las comisuras de sus cejas y se quedó un poco aturdida. Le tomó un tiempo a ella volver a sus sentidos. "Jeremy, puedes dejarme".

"¿Qué estupidez estás diciendo? ¡¿Cómo podría dejarte?!". El tono de Jeremy se agravó. Después de decir eso, él se dio cuenta de que había perdido un poco el control de sí mismo. Luego, él rápidamente dijo en voz baja: "Linnie, no puedo cerrar los ojos y ver cómo te lastiman de nuevo. Si algo le pasara a uno de nosotros, que sea a mí".

Su tono mostraba determinación y no había ninguna pretensión de afecto.

Sin embargo, el fuego se estaba extendiendo rápidamente y el humo sofocante los cubría. La garganta de Madeline comenzó a sentirse incómoda.

Ella tosió dos veces y Jeremy notó el malestar de Madeline. Él apretó los puños y golpeó el cincel contra la cerradura de la puerta.

Jeremy vio la mano extendida de Madeline, pero no pudo ignorar su pantorrilla que acababa de ser golpeada por la caja de madera. Era obvio que él se había lesionado un hueso. Él apenas podía mover su pierna izquierda ahora.

"Jeremy, ¿por qué estás perdiendo el tiempo? ¡Agarra mi mano!". Madeline lo instó con ansiedad, con la voz temblorosa.

La caja tenía más de un metro de alto y no había nadie ni nada más. Con su pierna lesionada e inmóvil, Jeremy no quiso perder más tiempo.

Él vio la mano de Madeline extendida entre el humo con su visión borrosa. Sonriendo, le tomó la mano suavemente y bajó la cabeza antes de besarla suavemente.

Madeline se sorprendió por las acciones de Jeremy y de repente lo escuchó decir: "Linnie, ¿sabes cuáles son las dos cosas más afortunadas que me han sucedido en mi vida? Una es que nos encontramos cuando regresaste una vez más. La otra fue hace mucho tiempo cuando nos conocimos junto al mar".

Al escuchar eso, Madeline no supo si era por el humo que sus ojos estaban irritados, pero sus lágrimas cayeron de repente.

Aturdido, Jeremy le soltó la mano y la empujó con fuerza.

"Linnie, nos volveremos a encontrar si realmente hay otra vida".