Esposa Pecadora romance Capítulo 676

La expresión en el rostro de Jeremy cambió ligeramente, al escuchar eso.

Sabía que Madeline se refería a Felicity, pero no sabía cómo se veía. Se sorprendió mucho por el comentario de Madeline.

‘¿Está diciendo la verdad?’.

A pesar de sus dudas, Jeremy sonrió con indiferencia. "Conocí a Fel después de quedarme ciego. Ni siquiera sé qué aspecto tiene".

"¿Fel? ¿Es un apodo cariñoso? Parece que tu relación con ella es muy buena, ¿no?".

Jeremy frunció ligeramente sus finos labios. No pudo saber a qué se refería Madeline, pero sonrió y asintió. "Sí, Felicity y yo tenemos una muy buena relación. Congeniamos nada más conocernos. Ella fue la luz para mí al final del túnel. Ella me permitió entender lo que es amar a alguien de verdad".

Dijo algo que no creía y sonrió forzosamente.

"Srta. Montgomery, si me pidió que viniera aquí solo para preguntarme si todavía te amo o no, ya te he dado mi respuesta. Antes te amaba, mucho, pero ahora... Ya no es así. Ahora amo a otra persona. Srta. Montgomery, usted y yo somos cosa del pasado. Como ha dicho, ya no nos debemos nada y no debemos volver a vernos".

Dijo esas frías palabras sin titubear y le entregó el paraguas que tenía en la mano a Madeline.

"Se hace tarde. Voy a volver, Srta. Montgomery. Tome esto para que no se gane un resfriado y fiebre. Los que te quieren de verdad, se preocupan por ti".

Cuando Madeline vio que le entregaba el paraguas, se rio.

"Como los dos ya no nos debemos nada, me gustaría pedirte que no hagas estas cosas innecesarias".

Ella se negó con indiferencia, mientras las gotas de lluvia caían sobre la cara y el cuerpo de ambos. El fresco viento otoñal soplaba.

Jeremy frunció ligeramente el ceño. ¿Cosas innecesarias?

No entendía, pero pronto escuchó la voz de Madeline resonando en sus oídos.

"Sr. Whitman, por favor, no te preocupes por si me voy a enfermar o no. No te ocupes de mí cuando tenga un resfriado o fiebre, y no te des la vuelta para salvarme cuando me caiga al agua y me esté ahogando, y mucho menos cuando me esté quemando hasta morir, mientras lucho y peleo con el destino".

"No te necesito. Y especialmente no necesito que finjas ser la mejor persona, entregándome a otro hombre".

¿Por qué no podía hacer algo tan pequeño por ella?

‘Jeremy, ¿qué estupidez has hecho esta vez? ¿No puedes hacer una sola cosa que la haga feliz?’.

"¡Linnie!".

Jeremy llamó a Madeline y tropezó, mientras pensaba que la perseguía.

Sin embargo, como había perdido la vista, no iba en la dirección correcta.

Caminó hacia la carretera sin ver nada y, en la oscuridad, oyó los bocinazos de los coches, que se escuchaban cerca y lejos a la vez.

Madeline, que no había ido muy lejos, miró hacia atrás y vio a Jeremy caminando hacia el centro de la carretera.

Cuando vio que un camión que iba a toda velocidad estaba a punto de atropellar a Jeremy, al no poder pisar los frenos a tiempo, un miedo que nunca había sentido antes hizo que el corazón de Madeline se le subiera a la garganta. El indescriptible pánico la hizo gritar con fuerza: "¡Jeremy!".