Esposa Pecadora romance Capítulo 748

Los ojos de Cathy brillaron mientras miraba al hombre sonriente frente a ella, con incredulidad. Ella se sintió caer bajo la mirada hipnótica del hombre, ya que ella no podía rechazar su encanto.

"No te preocupes, Felipe. No te defraudaré".

Felipe frunció los labios con satisfacción, antes de sellar de nuevo los de Cathy con los suyos.

Él la llevó en sus brazos, y el calor pareció florecer donde sus pieles se tocaban. La ropa cubría el suelo, prenda por prenda, mientras sus cuerpos se enredaban y entrelazaban.

A Cathy le pareció un sueño. Era tan dulce que cerró los ojos y deseó no despertarse nunca de eso.

Con todas las acciones de Miss L.ady transferidas a Felipe, Madeline ya no se ocupaba de la tienda ni era la diseñadora principal de Miss L.ady.

Pasó todos los días concentrada en llevar y recoger a Jackson, hacia y desde la escuela, mientras que su tiempo libre lo usaba para investigar la muerte de Lillian.

Ella quería empezar por Felicity, pero esta última parecía haberse desvanecido en el aire y no se podía encontrar en absoluto.

Después de llevar a Jackson al jardín de infancia, Madeline llegó al hotel en el que Felicity se alojó, una vez.

No era la primera vez que ella había estado allí, pero el hotel se negó a revelar información sobre la mujer.

Al hotel se le daba bien resguardar la confidencialidad de los datos de sus clientes, pero justo eso dejó a Madeline sin ninguna pista.

Perdido, Jeremy apareció de repente.

Con una chaqueta de cuero negra, el aura del hombre tamboreaba con elegancia.

Habían pasado más de dos semanas desde la última vez que ella lo vio, y parecía haber madurado mucho durante ese tiempo.

Al verlo, el gerente del vestíbulo se acercó a Jeremy y lo saludó cortésmente. "¿Cómo puedo ayudarlo, Sr. Whitman?".

"Srta. Montgomery, aquí está la información y la tarjeta de la habitación que quería". El gerente del vestíbulo los interrumpió y les entregó las cosas.

Tomando la tarjeta de la habitación y los papeles, Madeline se fue para tomar el ascensor sin decirle una palabra a Jeremy, mientras el hombre la seguía al ascensor.

Por los periódicos, Madeline se dio cuenta de que Felicity aún no había salido de la habitación. Parecía que tenía la intención de alquilar la habitación durante un largo período de tiempo, a pesar de que parecía haber desaparecido.

Madeline pasó la tarjeta y entró en la habitación, sus ojos se posaron inmediatamente en un par de zapatos familiares junto a la entrada.

El reflejo en el armario de cristal era, de hecho, el de Felicity Walker.

Había mucho que descubrir de esta mujer que se parecía tanto a Madeline.

Madeline estaba tratando de buscar pistas y pistas, cuando de repente escuchó la voz seria de Jeremy llamándola. “Ven rápido, Linnie. Hay algo aquí en el baño que quizás quieras ver".