Esposa Pecadora romance Capítulo 753

Las acciones de Jeremy fueron demasiado repentinas y Madeline no tuvo tiempo de reaccionar, pero ella comprendió rápidamente el razonamiento detrás de su movimiento.

Él quería que el hombre los confundiera con una pareja que estaba tan profundamente cautivada, el uno por el otro, que no podían evitar actuar según sus deseos.

El hombre era astuto, por lo que se acercó a ellos, de todos modos.

Madeline no tuvo más remedio que voltear la cara y estirar la mano para sostener los hombros de Jeremy mientras le devolvía el beso.

A pesar del frío día de diciembre, Madeline sintió que su cuerpo se calentaba y su corazón perdía el ritmo que antes estaba tranquilo.

Ella no estaba segura de si Jeremy lo estaba haciendo a propósito o para mantener su actuación, pero ella sintió que él profundizaba el beso y metía una mano en su chaqueta para sujetar su cintura...

Toc, toc, toc.

El hombre tocó la ventana.

Los besos de Jeremy se detuvieron.

“Esto es propiedad privada. Si van a tener intimidad, háganlo en otro lugar", dijo el hombre con disgusto.

Jeremy le dio al hombre una mirada fría mientras Madeline dejaba caer la cabeza hacia adelante y fuera de la vista, en una demostración de vergüenza.

"Vamos", le dijo en voz baja.

Jeremy obedeció y pisó el acelerador.

Jeremy se alejó un poco de La Mansión Aliento de Bebe y finalmente detuvo el coche.

El interior estaba excepcionalmente silencioso, tanto que Madeline podía oír los latidos de su propio corazón.

Jeremy abrió la boca para explicar: "La situación fue un poco apresurada, así que yo...".

Madeline se sorprendió, porque ella comprendió lo que quería decir Jeremy.

No queriendo levantar más sospechas, Jeremy estacionó el coche en algún lugar escondido y comenzó a observar la mansión con Madeline.

Habían pasado todo el día allí, hasta que oscureció, pero no vieron ni la más mínima actividad dentro de la mansión. Jeremy no pudo evitar arrastrar la mirada hasta el perfil lateral de Madeline.

Él dudó un momento, antes de abrir la boca para preguntar: “¿Podrías contarme sobre los tres años que pasaste fuera, Linnie? ¿Tenías buena vida aquí?”.

Madeline guardó silencio antes de soltar una carcajada. "¿Buena? ¿Qué opinas?", ella respondió con un tono de burla.

“Me dejó morir cruelmente el hombre al que me dediqué, durante más de una década. Por el bien de Lillian, me recompuse, me cuidé y absorbí todo el conocimiento que pude. Si no hubiera sido por la fuerza que me dio Lillian y mi deseo de vengarme, durante esos tres años, nunca sería quien soy hoy".

Madeline miró a Jeremy. "Incluso en mis sueños durante esos tres años, recé para que sufrieras día y noche... que perdieras todo lo que tenías".

A Jeremy le dolió el corazón por la abrumadora culpabilidad, al asimilar el odio que Madeline solía sentir hacia él.