Esposa Pecadora romance Capítulo 831

Madeline sintió que el corazón le daba un vuelco.

¿Jeremy había estado despierto todo el tiempo? ¿Él había estado fingiendo dormir?

¿Él escuchó todo lo que ella dijo, hacía un momento?

Madeline no sabía cómo manejar la situación que estaba sucediendo en ese momento, pero ella se dio cuenta de que Jeremy solo estaba cambiando de posición. Él no había estado fingiendo dormir y no escuchó lo que ella dijo.

Cuando ella vio eso, Madeline se sintió decepcionada, aunque realmente se había asustado, al mismo tiempo.

‘En realidad, esperaba que averiguaras la verdad’.

‘Pero tengo miedo de que nuestra hija vuelva a estar en peligro, si lo supieras’.

Madeline escapó del abrazo de Jeremy y usó todas sus fuerzas para tirar al hombre y acostarlo en la cama.

Después de hacer todo eso, Madeline estaba exhausta. Por lo tanto, se acostó junto a Jeremy y se durmió.

Mirando su dulce rostro dormido, Madeline levantó su mano suavemente y la colocó sobre su vientre. “Jeremy, cuando tuve a Jack, deseaba que me creyeras. Anhelaba que me tocaras el vientre y sintieras la existencia de Jack, pero no solo no me creíste, incluso me gritaste y me ignoraste. ¿Puedes sentirlo, ahora? Este es nuestro hijo y está creciendo en mi vientre".

Sus ojos estaban rojos y llenos de lágrimas, mientras se acercaba a él.

“Realmente espero que puedas ver el nacimiento de tu hijo, esta vez. Quiero que veas cómo se ve nuestro hijo de bebé".

Madeline se esperanzó y cerró los ojos, mientras se inclinaba hacia Jeremy.

El día siguiente.

Cuando Madeline se despertó, ella era la única en la cama.

Ella no sabía a dónde fue Jeremy.

Después de bañarse, se dio cuenta de que la puerta de la habitación no estaba cerrada.

Ella estaba a punto de bajar, cuando Ken entró cojeando en la habitación, con el desayuno.

Ella cogió el paraguas al lado de la puerta y caminó bajo la lluvia.

Sin embargo, en el momento en que ella salió, el coche de Jeremy se detuvo frente a ella.

Cuando él vio salir a Madeline, salió del coche y caminó frente a ella, con expresión seria. "¿A dónde vas?".

Madeline dejó escapar un suspiro de alivio, cuando lo vio regresar sano y salvo. Sin embargo, parecía fría por fuera. "No creo que sea asunto tuyo adonde quiero ir".

El rostro de Jeremy se oscureció aún más. Luego, él tomó la mano de Madeline y la llevó de regreso a la casa.

Cuando Ken vio eso, se sintió un poco aliviado.

Si Madeline se hubiera ido así, él no sabría qué decirle a Jeremy.

Jeremy miró el desayuno intacto y frunció el ceño. "Ve a comer algo y no intentes irte, de nuevo. No te permitiré volver con Felipe".

Después de que él terminó de decirle eso a Madeline, se dio la vuelta hacia Ken y le dijo: "Ven conmigo".