Ex esposa, "Vamos a casarnos" romance Capítulo 127

A medida que el coche se movía, el icono de navegación se movía también.

Según la ruta, parecía que el coche se dirigía realmente al club de Michael.

Sin embargo, ¿dejaría Dona ver a la tía Tonya tan fácilmente?

...

En el último piso de la Torre Carter, Cliff llegó a la puerta del despacho. Llamó dos veces, la abrió de un empujón y entró apresuradamente.

"Amo Carter, hemos averiguado dónde está retenida la tía Tonya". Se acercó al escritorio de Odell y continuó informando: "La gente que enviamos a investigar descubrió que ha sido encerrada en un club que le pertenece a Michael Ledger".

Odell asintió después de escuchar esto.

"Hay una cosa más, Amo Carter", dijo Cliff algo apresurado. Sin embargo, no sabía si debía decirlo o no.

Odell frunció el ceño. "¿De qué se trata?".

"La gente que fue al club a investigar descubrió que Michael también acaba de llegar".

"¿No es normal que vaya a su propio club?".

"Escucharon en secreto una llamada que recibió Michael. La persona al otro lado del teléfono le dijo que la señorita Ross se había subido al coche. Michael estaba muy emocionado después de escuchar esto e hizo que la gente preparara algo de vino. Parece que también preparó un polvo que hará que una persona se desmaye al olerlo. También hizo que la gente limpiara la mejor suite del club. Está esperando a que llegue la señorita Ross".

No hacía falta decir lo que Michael le haría a Sylvia cuando llegara.

La expresión de Odell se volvió de ira al instante.

Al segundo siguiente, se levantó y salió diciendo con voz fría: "Trae a unas cuantas personas y sígueme hasta allí inmediatamente".

Cliff obedeció rápidamente.

...

Al cabo de una media hora, el coche de Sylvia se detuvo frente al club, que estaba decorado con un ambiente de nuevos ricos.

Sin embargo, todo lo que vio en el interior fue un lujoso mobiliario y una mesa de vino. El interior estaba limpio y vacío. No parecía que hubiera nadie alrededor.

Sintió que algo andaba mal y se dio de inmediato la vuelta para salir.

Sin embargo, el hombre de la puerta le dio un fuerte empujón.

Ella tropezó y cayó dentro.

Inmediatamente, la puerta de la habitación se cerró con un golpe.

Sylvia se giró y estaba a punto de agarrar el pomo de la puerta cuando, de repente, por el rabillo del ojo, una figura gorda se abalanzó sobre ella.

Ella se giró rápidamente y esquivó haciéndose a un lado.

Michael, que quería agarrarla, no alcanzó su objetivo y casi perdió el equilibrio.