Héroe Retrasado romance Capítulo 373

—Soy el jefe, pero al final tengo que hacer el trabajo —dijo Jiang Ning con cierta impotencia en el teléfono—. Déjame a mí la expansión hacia la región sureste, querida, no te preocupes por eso. Prometo completar esta misión y prometo no ser un mujeriego ni nada por el estilo. Si no me crees, puedes comprobarlo cuando vuelva.

Huang Yuming estaba sentado junto a Jiang Ning e hizo todo lo posible por no reír. Tenía muchas ganas, pero no se atrevía. Su cara se iba a hinchar pronto.

¿Quién lo hubiera pensado? El gran Rey Demonio llamado Jiang Ning no tenía mal genio cuando estaba hablando con Lin Yuzhen. A pesar de que fue por teléfono, la voz de Jiang Ning era tan suave.

Después de colgar, Jiang Ning exhaló en voz alta.

—¡Es inevitable! Una vez que las mujeres comienzan a pegarse a ti, no hay nada qué hacer —dijo muy serio mientras se encogía de hombros.

Huang Yuming asintió con la cabeza.

—De hecho, Gran Jefe, nadie puede resistirse a tu encanto, así que Yuzhen debe haberse enamorado de verdad.

Cuando era el momento de lamer botas, tenía que hacerse. Y había que hacerlo bien.

Muy pronto, la expresión de Jiang Ning volvió a su estado normal y había una mirada siniestra en sus ojos.

—La familia Yang me ha ofendido tantas veces e incluso se atrevieron a señalar a Lin Yuzhen como un objetivo para el Clan de los Asesinos. Seguro no puedo sólo ignorar eso. —entrecerró los ojos—. ¡Hoy, los voy a llevar a todos para matar a esas personas!

El mayordomo Zhao había recibido información de que el círculo ilegal de Jianzhou estaba reuniendo hombres y que, si todo salía según lo planeado, se abrirían camino hasta Donghai al día siguiente. Querían atacar con fuerza en Donghai en la cima de su reputación y autoridad como territorio prohibido.

Pero no sabían que Jiang Ning ya iba hacia ellos.

—¡Esta vez, vamos a arrasar con el círculo ilegal de Jianzhou y acabar con la familia Yang! —dijo Huang Yuming con una voz siniestra.

Llevaron quince de los treinta lobos. ¡Solo quince! Los otros quince estaban escondidos en varias partes de Donghai, por si acaso surgía algo. Incluso había más hombres pasando la primera etapa de entrenamiento en ese momento. Poco a poco se entrenaban para convertirse en guardianes de Donghai.

Jiang Ning sabía que no era suficiente confiar en sí mismo y en los lobos para hacer de Donghai un verdadero territorio prohibido. Donghai necesitaba más personas para seguir creciendo su poder. Cuando comenzaran a abrirse camino en el extranjero y alcanzar la cima del mundo, Donghai necesitaría aún más personas para que la resguardaran.

Verifica el captcha para leer el contenidoVerificar