Héroe Retrasado romance Capítulo 503

―¡Su Gang! ―Su Mei estaba con una enorme sonrisa mientras se acercaba rápidamente—. ¡Todos están aquí!

―Sí, ve a buscarla.

Su Yun asintió y entró corriendo sin dudarlo.

―Esa niña realmente no tiene modales ―Su Gang negó con la cabeza y miró a su esposa―. ¡La has echado a perder!

La esposa de Su Gang, Yang Li, miró un poco apenada a su esposo. De repente recordó que todavía tenía cosas en el baúl, así que hizo que el hermano Gou lo abriera y sacó todo el rábano en escabeche que había traído.

―Tu hermano dijo que te encanta comerlo, así que preparé para ti.

Cuando la familia Lin pasaba por un mal momento, Su Gang había visitado a Su Mei dos veces. Además de traer algo de dinero, también había traído estos rábanos preparados.

No valían mucho dinero, pero Su Mei siempre lo recordaba.

Rápidamente lo tomó y abrazó la caja de rábanos.

―¡Muchas gracias, Yang Li! He echado mucho de menos estos rábanos y traté de hacerlos yo mismo, ¡pero nunca tuvieron buen sabor! ¡Tienes que enseñarme más tarde!

―¡Claro! ¡Claro! ―Yang Li respondió feliz.

Todavía se mostraba preocupada de que Su Mei los despreciara.

―¡No se queden ahí parados, entren! ―dijo Su Mei.

Su Hong se paró en la puerta y arrugó la nariz. Pensó que la familia de Su Gang había traído algo elegante, pero sólo eran rábanos. ¿Cuánto vale eso?

No podía creer que realmente se atrevieran a traer algo así. Olvidó que ni siquiera había traído una sola cosa y que sólo trajo esta sucia boca.

Su Gang y su esposa se sorprendieron por la casa en el momento en que entraron. El bungaló era demasiado grande Ambos parecían muy cautelosos y ni siquiera sabían en qué dirección empezar a caminar.

―Siéntanse como en casa ―dijo Su Mei con una sonrisa―. Tomen asiento, empezaré a cocinar, Lin Wen volverá pronto.

Después de que Su Mei desapareció en la cocina, Su Gang y Yang Li se sentaron con cuidado en el sofá y tocaron el sofá de cuero auténtico. Su cuidado hizo reír a Su Hong y a Xu Ming.

―Su Gang, no actúes como si nunca hubieras visto el mundo antes. ―Su Hong se rio―. Esta es la casa de Su Mei, así que puedes tratarla como si fuera tuya.

Ella tampoco se había comportado de manera muy diferente a Su Gang antes.

―Cuando mi familia compre un bungaló en el futuro, tú también puedes venir a visitarnos.

Su Gang no dijo nada, pero Yang Li no pudo resistir el impulso.

―Su Hong, ¿vas a comprar un bungaló? Eso es increíble.

―Escuché que el cementerio cerca de tu casa se ha convertido en un fraccionamiento de bungalós, pero nadie los ha comprado todavía. No creo que sean demasiado caros, así que puedes considerarlos.

―¡Eres una muchacha horrible! ¿Cómo te atreves a entrar a mi habitación? ―Lin Yuzhen saltó del abrazo de Jiang Ning y su cara estaba roja mientras amenazaba a Su Yun―. ¡Voy a decirle a tu mamá!

―¡Noooo! ¡Yuzhen! ¡Perdóname! ¡Siempre he entrado a tu habitación así desde que éramos niñas!

Este ya era su hábito y se olvidó por completo de que Lin Yuzhen ya estaba casada.

―Mira, incluso mi cuñado no está enojado, así que tú no puedes estar enojada, ¿o sí?

Ella sonrió y supo que Jiang Ning tenía buen temperamento y no se enojaría con ella.

―Eres la leyenda de Shengcheng, no me atrevería a ofenderte ―dijo Jiang Ning con una sonrisa―. Bajemos y charlemos más tarde. Es hora de comer.

Después de que se fue, Su Yun inmediatamente enganchó el brazo de Lin Yuzhen y susurró:

―Yuzhen, ¿estás esperando?

―¿Esperando qué?

―¡Un bebé! ¿Es que ustedes dos aún no han... tú sabes? ¿Qué se siente?

―¡Eres horrible! ¡Te voy a arrancar la boca!

……