La Cenicienta Guerrera romance Capítulo 529

A los ojos de Jennifer, el cambio de opinión de Bianca era un claro ejemplo de cómo el afecto por una persona puede influir en la percepción de un lugar entero. Porque Úrsula la había ayudado, ahora veía a Mareterra con otros ojos.

No se podía negar que Úrsula era excepcional. Pero, por muy excepcional que fuera, no se podía comparar con el Doctor W.

¡Jennifer se negaba a creer que el Doctor W pudiera ser de Mareterra!

Cualquier otra persona no se atrevería a hablarle así a Bianca.

Pero Jennifer era diferente.

No solo era la mejor guardaespaldas del País del Norte, sino que había crecido con Bianca. Aunque en teoría eran señora y sirvienta, en la práctica eran como hermanas.

Muchas veces, sus opiniones coincidían.

Pero ahora, era evidente que no estaban de acuerdo.

Bianca negó con la cabeza.

—No es que vea las cosas de otra manera por ella. ¡Es que desde el principio hemos subestimado esta tierra mágica de Mareterra! Tengo el presentimiento de que el Doctor W es, sin duda, de aquí.

Al ver la convicción de Bianca, Jennifer dejó de discutir.

—Señorita Ramsey, como también dicen en Mareterra, los hechos valen más que las palabras. Si el Doctor W es de aquí o no, lo sabremos cuando lo encontremos.

Entonces, Bianca se daría cuenta de lo equivocada que estaba.

—Tienes razón —asintió Bianca—. Los hechos valen más que las palabras.

—Por cierto —continuó Jennifer—, ¿de verdad ha decidido no decírselo a su madre?

Se refería a la medicación.

—No es necesario —negó Bianca.

Su madre era muy desconfiada. Con la muerte de sus hermanos y la enfermedad del que quedaba, vivía en un estado de alerta constante. Si se enteraba, seguro que se opondría a que tomara la medicación.

Bianca podía imaginarse el resultado.

Si se lo contaba ahora, su madre intentaría detenerla.

Por lo tanto, era un secreto que debía guardar.

Al oír esto, Jennifer vaciló.

—Si no se lo dice, y si, por casualidad…

Bianca era de sangre noble. Si no informaban y algo salía mal con la medicación, Jennifer temía no poder dar explicaciones. Aunque eran como hermanas, no lo eran de verdad. Si a Bianca le pasaba algo, ella también sufriría las consecuencias.

—¡No hay "por casualidad"! —la interrumpió Bianca—. La señorita Solano es una médica excepcional, capaz de hacer milagros. ¡Confío en ella!

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