La Doctora Maravilla romance Capítulo 116

Bajo las órdenes de Óscar, Adán llamó a Emma.

—¿Reunión familiar? —preguntó Emma—. ¡Eso no tiene nada que ver conmigo!

—Señorita Linares, solo soy el mensajero. Si tiene alguna opinión al respecto, puede decírsela al abuelo.

—¡Infeliz!

Emma estaba a punto de comenzar a gritarle cuando la llamada terminó de un momento para otro. El rostro de Emma estaba rojo de coraje.

«¡Malditos! ¡Todos ellos! ¡No se puede razonar con nadie de la Familia Rivera! Incluso Abel me dice que tengo que ir a la reunión familiar. ¿Qué tiene que ver eso conmigo? ¡Estoy harta de ti, Abel!».

Emma marcó el número de Abel desde su móvil. En ese momento, Abel estaba en la sala de fumadores con Lucas, así que dejó el móvil en la habitación. Alana se levantó a toda velocidad de la cama y tomó el móvil. La mujer sonrió.

«¿Emma? ¡Ja, ja, ja! ¿No sabes que te estás buscando problemas?».

Tocó el botón de responder y dijo:

—¡Oye, Emma! ¿Estás buscando a mi marido?

«¿Alana? ¿Qué fue lo que dijo? ¿Su marido? ¿Quién es su marido? ¿Se refiere a Abel?».

Emma no respondió. Terminó la llamada de inmediato. Sin embargo, la llamada fue devuelta al segundo siguiente. Emma pensó que Abel la estaba llamando. Contestó.

—Emma, ¡no te olvides de la reunión familiar de mañana! —dijo Alana y terminó la llamada.

Emma se quedó viendo el móvil, sorprendida. No quería asistir a la reunión, pero parecía que tenía que hacerlo. Se hizo crujir los nudillos.

«Bien, iré. ¡No te tengo miedo!».

Cuando terminó la llamada, Alana se rio con suficiencia.

—¡Te estaré esperando, Emma!

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