La Esposa de Lobo romance Capítulo 118

El que gritó era el encargado de la Administración General de Supervisión de Calidad, Adam Strong.

Sin embargo, cuando Densel vio a Adam, parecía más encantado que nunca. Se acercó atentamente al hombre y le dijo: “¡Adam, cuñado mío, estás aquí! ¡Adelante! ¡Adelante!".

¡¿Cuñado?!

¿El ministro de la Administración General de Supervisión de Calidad era cuñado de Densel?

No era de extrañar que Densel no dudara al expresar sus amenazas. Su relación con Adam alimentaba su arrogancia.

“Tú, mocoso…”. Densel continuó burlándose de Andrius mientras llevaba a Adam al vestíbulo. “¡Nunca se te paso por la cabeza que la ayuda a la que llamaste es mi cuñado, quien es mi aliado, no el tuyo!”.

"También puedo decirte que en términos de supervisión de calidad e inspección de seguridad en Sumeria, tenemos la máxima autoridad y nuestras palabras son la ley y el orden aquí".

Continuó siendo arrogante e irrespetuoso.

Detrás de él, la expresión de Adam se volvió sombría.

Andrius gruñó. Se levantó, agarró a Densel por el cuello y lo abofeteó repetidamente.

¡Bofetada! ¡Bofetada! ¡Bofetada!

Las bofetadas despiadadas dejaron a Densel sangrando por la boca y su cabeza se mareó. Incluso gritó pidiendo ayuda, pero nadie se atrevió a detener a Andrius.

Luego, fue arrojado al suelo como un pedazo de basura.

“A-Adam…”. Densel apenas podia respirar. Casi perdió el conocimiento, pero le pidió ayuda a Adam. “A-ayúdame”.

Andrius miró a Adam y le preguntó: “Adam Strong, no supervisaste a tu hombre, así que hice el trabajo por ti. ¿Alguna pregunta?".

La frente de Adam brillaba de sudor. Hizo una reverencia y asintió con reverencia y dijo: “N-no, señor. Lo hiciste increíble. ¡Lamento mi ignorancia y le agradezco su ayuda!”.

Se agachó para hablar con Andrius, pareciendo lo más humilde posible.

Luego Adam se acercó a Andrius y se inclinó, disculpándose.

“Señor, lo siento mucho por esto. Es mi negligencia por no enseñar bien a mis hombres, de ahí su arrogancia y estupidez. Me aseguraré de enseñarle bien y evitaré que cause más problemas”.

Adam veneraba a Andrius. Después de todo, había recibido una llamada del propio Noir, el Lobo Negro.

El Lobo Negro era el capitán de los Lobos de las Sombras, el escuadrón de élite directamente bajo el mando del Rey Lobo. Incluso si no fuera nadie importante, la única persona que alguien tan influyente como el Lobo Negro respetaba no era alguien a quien Adam pudiera permitirse ofender.

Andrius dijo: “¿Terminaste? Le oí decir que alguien fue arrastrado por un camión durante unos kilómetros. ¿Sucedió?”.

Densel fue lo suficientemente estúpido como para mencionarlo delante de Andrius, lo cual fue suicida para él.

Adam volvió a abofetear a Densel y lo regañó: “¡Pedazo de m*erda! ¡Nunca pensé que serías tan atrevido como para hacer algo como esto! ¡A partir de hoy ya no eres el director de la Administración General de Supervisión de Calidad!”.

Densel se ahogó en su propio agravio.