La Esposa de Lobo romance Capítulo 213

Andrius no se inmutó mientras Jude se regodeaba en él.

Ford y Jennifer giraron instintivamente hacia Halle.

"¡Halle, ven aquí!". Ford le hizo varias señas a su hija, temeroso de que el Amo Turner malinterpretara la situación.

Jennifer fue mucho más directa. Se acercó a Halle, la agarró del brazo y quiso arrastrarla lejos de Andrius para que no se viera involucrada cuando el Amo Turner culpara a Andrius.

Halle de alguna manera se cimentó en el lugar. Por mucho que su madre tirara de ella, ni siquiera se movió. Su persistencia puso ansiosa a su madre, pero no había nada que Jennifer pudiera hacer.

El Amo Turner ya estaba de pie frente a Andrius.

La sonrisa de Jude se ensanchó. Estaba encantado porque Andrius pronto sería regañado y reprendido por el Amo Turner.

Jennifer y Ford también estaban ansiosos y nerviosos.

"¡Señor Moonshade!". Hansel se inclinó profundamente frente a Andrius y le dio una sincera bienvenida: "Es un honor verlo aquí, en Sumeria".

¿Qué?

¿Qué acaba de pasar?

Jude, Ford y Jennifer se quedaron de piedra.

¿No debería el Amo Turner regañar a Andrius antes de echarlo por la puerta? ¿Qué estaba pasando?

A juzgar por el tono del Amo Turner, parecía conocer a Andrius.

Andrius permaneció sentado tranquilamente. "Hansel, no deberías haberlo hecho. No hay necesidad de que me hagas las cosas tan grandiosas".

"Sí, señor". Hansel asintió repetidas veces.

Luego miró a Halle y a su madre a su lado. Preguntó: "Señor, ¿están con usted?".

Antes de que Andrius pudiera decir una palabra, Jennifer asintió inmediatamente y dijo: "Sí, estamos juntos".

Ella no era idiota, así que se dio de que el Amo Turner trataba a Andrius con respeto. Se conocían.

El Amo Turner solo salió por Andrius.

"¡Sí! Sí, ¡estamos juntos!". Ford también asintió.

Cuando todos estaban sentados, Hansel trajo una caja de hojas de té. "Son hojas de té que recibí el otro día del Monte Fiver. Son té rooibos de calidad y aún no me he animado a beberlas. Ahora que estás aquí, creo que es una buena oportunidad para que lo probemos".

Hansel charlaba con Andrius como si fueran viejos amigos hablando de todo tipo de temas.

Hansel era el que más hablaba, mientras que Andrius se limitaba a escuchar, asentir y sonreír en respuesta a su hospitalidad.

Halle se unía a la conversación de vez en cuando.

En cuanto a Jude, Ford y Jennifer, seguían sintiéndose incómodos y se limitaban a esbozar sonrisas incómodas durante toda la conversación.

Media hora más tarde, el criado de antes entró y susurró algo al oído de Hansel.

La expresión de Hansel cambió. Puso cara de disculpa y le dijo a Andrius: "Señor Moonshade, le ruego que me disculpe, tengo algo urgente que atender. Es posible que no pueda...".

"No pasa nada". Andrius se levantó y dijo: "Entonces, yo también debería irme".

El grupo regresó a casa de Halle.

En el camino de vuelta, Ford y Jennifer trataron de decir lo que pensaban, pero las palabras se atascaban en sus gargantas.