La Esposa de Lobo romance Capítulo 219

"Qué buen día...".

Después de preparar su malicioso plan, Jeremy se sintió emocionado.

Incluso la brisa salada del mar se sentía dulce. Tarareó una melodía mientras empezaba a imaginarse lo tórrido que sería meterse en la cama con Luna. Después de todo, era conocida por ser una de las mujeres más bellas de Sumeria.

Hoy sería una noche sin sueño.

Ring...

Entonces, el teléfono de Jeremy sonó.

Era de un número que no tenía registrado. Estaba de buen humor, así que contestó.

Al otro lado de la llamada sonaba una voz fría: "Soy Sonia Timberland. Busco al propietario del Complejo Vía Galaxia, Jeremy Todd".

"¿Señorita Timberland?". Jeremy se quedó sorprendido un momento antes de decir: "Soy Jeremy Todd, el propietario del Complejo Vía Galaxia. Me pregunto...".

"Los Timberland ofrecen 300 millones para comprar su complejo".

Las palabras de Sonia sorprendieron a Jeremy. Entonces, se dio cuenta de que Andrius parecía haber llamado a Sonia antes.

Ahora que Sonia lo llamó y le ofreció 300 millones para comprar su complejo, podría ser...

¡Imposible! ¡Imposible!

Jeremy desechó los pensamientos escandalosos de su mente.

Sonia era hija de Bruce Timberland, una de las tres grandes familias de Sumeria. Desde que los Henderson se retiraron, Sonia se convirtió en la mujer más rica e influyente de la ciudad. Todos los hombres la admiraban.

Andrius no era más que un tipo sin nombre de las montañas, un pobre in*til que solo sabía presumir.

Estaban a cielo y tierra de distancia, así que ¿cómo iban a conocerse?

Esta sería la última vez que abusaría de su poder como propietario desde que aceptó vender el complejo a los Timberland. Sin embargo, dado que su último objetivo era su amor del instituto, Luna, sería el colofón perfecto a sus aventuras sexuales.

Por otro lado, después de que Luna arrastrara a Andrius hacia arriba, lo miró con cara seria y refunfuñó: "Andrius, ¿puedes dejar de presumir?".

Estaba que echaba humo.

La mala costumbre de Andrius no había cambiado por muchas veces que ella se lo advirtiera.

Luna lo miró con sus hermosos ojos. Su pecho se agitó fuertemente debido a la fluctuación emocional. Dijo fríamente: "Ser pobre no es algo de lo que avergonzarse, pero tú finges que no lo eres e intentas ir más allá de tus capacidades. Eso es muy vergonzoso. ¿Lo entiendes?".

Lo fulminó con la mirada antes de entrar en su habitación y le cerró la puerta de un portazo, sin darle la oportunidad de explicarse.

Bien. La mujer nunca le creería, así que ninguna explicación importaría.

Andrius suspiró y regresó a su habitación.