La Esposa de Lobo romance Capítulo 432

Después de abandonar el Palacio Prohibido, Andrius recibió una videollamada de los Licántropos cuando iba de camino al aeropuerto.

"¡Rey Lobo!".

"Rey Lobo, ¿qué ha pasado?".

"Rey Lobo, acabamos de recibir una orden de Kiyoto de que ya no serás el Rey Lobo, y que el Segundo Dios de la Guerra se encargará de nosotros. ¿Eso es cierto?".

"Rey Lobo, el Segundo Dios de la Guerra ya envió a alguien al cuartel general de los Licántropos. Los Licántropos se están enfrentando a él ahora. ¡Por favor, denos sus órdenes!".

Tan pronto como se conectó el vídeo, los altos mandos de los Licántropos preguntaron ansiosamente por la situación. ¡Estaban enfadados, ansiosos, indecisos y con lágrimas en los ojos!

Este grupo de soldados de sangre de hierro que eran indomables e inquebrantables, cuya voluntad era tan firme como una roca, inesperadamente lloraron en este momento, todo por el líder eterno en sus corazones.

Los Licántropos...

No fueron los Licántropos los que completaron al Rey Lobo. ¡Fue el Rey Lobo quien creó a los Licántropos!

¡Admiraban a Andrius desde sus corazones!

"Es verdad".

Andrius se sintió conmovido, y su tono era muy pesado. Miró a todas las caras conocidas. Había tenido un pasado emocionante con todos ellos. También estaba muy triste.

Pero tenía que decir la verdad.

"¡Rey Lobo!".

"Rey Lobo, ¿por qué?".

"¡Rey Lobo, el Segundo Dios de la Guerra no es digno de liderar a los Licántropos!".

"¡Rey Lobo, los Licántropos no pueden perderlo!".

Los altos mandos de los Licántropos instantáneamente lloraron ante las palabras de Andrius. Todos trataron de convencer a Andrius para que regresara.

"Chicos...".

Andrius ya se lo prometió al Emperador, y era un hombre de palabra. Así que los consoló y les dijo: "Escuchen las disposiciones de los superiores por el momento. Volveré".

La puerta del Paseo Marítimo de Ensueño ya estaba cerrada, así que Andrius no se acercó. Se fue directamente al Jardín Real a pasar la noche.

Para su sorpresa, la luz de la cocina seguía encendida.

Era Halle. Estaba preparando varias recetas de bocadillos nocturnos.

"Andrius...".

Al escuchar el ruido, Halle salió de la cocina y se sorprendió gratamente al ver a Andrius. "Llegaste justo a tiempo. Ven a probar los bocadillos de medianoche que preparé".

Después de hablar, corrió a la cocina y sacó un tazón de pasta con marisco.

Andrius tenía hambre, así que comió con ganas.

Halle se sentó frente a él con la cara apoyada en las manos. Al verlo comer tan feliz, no pudo evitar sentirse también encantada y una sonrisa se dibujó en su boca.

"Andrius, estemos juntos después de que te divorcies de Luna. ¡Cuando llegue el momento, te cocinaré todos los días!".