La Esposa de Lobo romance Capítulo 467

Andrius la miró sorprendido. Curioso, le preguntó: "¿Por qué? ¿No vas a regresar allí?".

"¿Por qué debería regresar allí?". Luna movió su cabello. El rubor que tenía por beber la hacía parecer encantadora. "Lo único que hacen es halagar a Zenith y presumir. Es aburrido".

"Está bien".

Andrius asintió y se subió al asiento del conductor; Luna, al del copiloto.

Preguntó: "¿Adónde?".

Luna dijo sin pensárselo dos veces: "Montaña Lunen".

¡Rum!

El coche arrancó y pronto desapareció al final de la calle.

La Montaña Lunen estaba ubicada en los suburbios occidentales de la ciudad, a casi 20 kilómetros del centro. Era una hora de viaje en coche.

"Ya llegamos".

Andrius detuvo el coche junto a la carretera y bajó la ventana. Lo que vio iluminó sus ojos.

Árboles frondosos estaban por todas partes. El aire estaba lleno de una fragancia desconocida de alguna flor de sabor dulce. La agradable brisa era como la música con la que bailaban las flores y las hojas. Era refrescante y relajante.

¡Crrr!

Luna echó la silla hacia atrás. Cogió la almohada del asiento trasero, acomodó su postura y se acostó.

La agradable brisa se llevó su depresión y ansiedad, permitiéndole relajarse.

"Siempre que me siento agotada vengo aquí a disfrutar del sol y de la brisa nocturna. Con un pequeño descanso, me siento renovada. Es como si la brisa se llevara mis problemas".

Luna se recostó perezosamente, con los ojos medio cerrados.

Su vestido se levantó ligeramente por su postura, revelando sus hermosas y largas piernas. Era una escena para morirse en ese ambiente romántico y cómodo.

Andrius había luchado en el campo de batalla durante diez años. Ha visto sangre y cadáveres la mayoría de las veces y apenas ha tenido tiempo libre para relajarse así. Disfrutaba de la brisa y se enamoró del ambiente cómodo también.

Hasta que se sirvió la última gota, uno de ellos dijo con pesar: "Lástima que solo tengamos dos botellas de un vodka tan bueno".

"Sí".

Harry tampoco tuvo suficiente. Dijo: "Este vodka Corona es el mejor que he probado".

¿Qué quería decir?

Zenith sonrió y preguntó: "Tío Harry, ¿quieres más?".

El Vodka Corona se consideraba un caché de coleccionista de edición limitada. Todo el mundo querría más.

"Ejem...". Harry aclaró la garganta y tragó saliva. Dijo: "Zenith, sé que eres influyente. ¿Tal vez puedas pedirle al dueño que nos dé dos botellas más?".

"¡Sí! ¡Joven Amo Mangold!".

"¡Para ti es fácil!".