La Esposa de Lobo romance Capítulo 55

La información de Andrius estaba clasificada como secreto nacional, pero el contacto de Venus era poderoso e influyente, y pudo sacar información útil.

Cuando Venus vio la foto de Andrius como el Rey Lobo, se estremeció y sudó en abundancia. "¿E-El es el Rey Lobo?".

Eso explicaba por qué el Lobo Negro de la Línea del Frente Occidental la llamaba en persona y le indicaba que se reuniera con Andrius abajo.

Andrius Moonshade era el Rey Lobo que comandaba a un millón de licántropos en la Línea del Frente Occidental.

Con eso, Venus bajó rápidamente las escaleras. Se dirigió a la mesa de Andrius y le dijo respetuosamente: "Sr. Moonshade, Sra. Fullbery, ¿qué tal la comida?".

Halle se sintió una vez más halagada y abrumada por la atención de Venus.

Antes de que pudiera darle las gracias a Venus, Andrius comentó: "La comida está bien, pero el vino es excepcional".

"Me aseguraré de mejorar eso". Venus hizo una reverencia y le entregó una tarjeta a Andrius. "Sr. Moonshade, ésta es nuestra membresía Diamante. Le da un 10% de descuento en todas las facturas, y puede cenar aquí gratis una vez cada tres meses. Por favor, acéptela".

La tarjeta de socio Diamante tenía diamantes incrustados, lo que le daba un aspecto extravagante y lujoso.

Después de que Andrius aceptara la tarjeta, se oyeron los rugidos de los motores fuera del restaurante.

Los comensales se asomaron a la ventana y vieron varios camiones militares que se detenían frente al restaurante. Los faros iluminaban intensamente la entrada.

El guardia de seguridad corrió a toda prisa, sudando profusamente del susto. "Jefa, son los hombres del gobernador Holland...".

Venus frunció el ceño. Entonces le dijo a Andrius: "Señor Moonshade, por favor, discúlpeme mientras me encargo de la situación".

Venus se dirigió hacia la entrada.

"¿Qué has dicho?". Roy estaba furioso. "Venus, ¿te pones en mi contra por tu respaldo? ¿Realmente crees que no me atreveré a irrumpir para apresarlo?".

"No me atrevo a ponerme en su contra, gobernador Holland, pero estoy segura de que ni siquiera usted puede permitirse ofender a la persona que está ahí dentro".

Dick, que estaba detrás de Roy, gritó: "¡Mentira! ¡Mi hermano es el gobernador militar de la ciudad! Puede ofender a quien quiera...".

"¡Cállate!". Roy fulminó a Dick con la mirada y le impidió empeorar las cosas.

Dick retrocedió de inmediato y cerró la boca.

Roy entonces levantó una ceja y dijo: "Yo sigo aquí fuera y no ahí dentro porque respeto a la persona que te respalda, pero tienes que decirle al rufián que hay dentro que salga. Ahora mismo. Venus, por favor, no me pongas en una situación difícil".

Inmediatamente, los hombres que estaban detrás de él prepararon sus armas.