La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 1816

Arianne recuperó sus sentidos y se apresuró a avanzar para separarlos. "¡Mark! ¡No es lo que piensas! ¡Por favor déjame explicarte!".

Mark instantáneamente la apartó. "¡Vete a la mi*rda!"

Arianne usaba tacones altos, por lo que la pradera ya hacía que su equilibrio fuera inestable. Pero después de ser empujada por Mark, ella instantáneamente cayó al suelo y su palma golpeó una roca, provocando un grito de dolor de su corazón.

Tanto la nariz como la boca de Mateo estaban sangrando. Levantó las manos para protegerse la cara mientras trataba de explicar. "Sr. Tremont, no es lo que piensas. Está bien si me malinterpreta; no me importa cómo me trates. ¡Pero no debes malinterpretar a Arianne!".

Cuando esas palabras protectoras llegaron a los oídos de Mark, solo pensaba que era más evidente que definitivamente había algo entre Mateo y Arianne. Cualquier explicación en ese momento solo haría que las cosas se vieran aún más sombrías.

Arianne no sabía qué hacer ya que no había nadie alrededor. ‘¡Si esto sigue así, Mark matará a Mateo a golpes! Y Mateo ni siquiera se defiende. Solo está protegiendo su cabeza. Desearía que él se defendiera, al menos podría defenderse por motivos de autodefensa. Pero si sigue siendo golpeado por Mark de esta manera, ¡las cosas se saldrán de control!".

Con ese pensamiento, Arianne soportó el dolor en sus pies y palma mientras temblorosamente se ponía de pie y se apresuraba hacia adelante. Se abrazó a la cintura de Mark. “¡Deja de golpearlo! Regresemos y hablemos de esto correctamente, ¿de acuerdo? No se parece en nada a lo que estás pensando. ¡Puedo explicarlo!".

Esta vez, Mark no apartó a Arianne y dejó de golpear a Mateo antes de soltar un suspiro. Su expresión no era clara ya que estaba oscuro afuera, pero su voz era tan fría, más fría de lo que ella nunca la había escuchado cuando dijo: “Arianne, ¿es esta tu forma de vengarte de mí? Odio más la traición...".

Mateo se levantó del suelo y estaba a punto de decir algo, pero Arianne gruñó y dijo: "¡Vete ahora, Mateo!".

Mateo estaba un poco indeciso, temiendo que Arianne se convirtiera en el próximo objetivo de Mark en el que descargar su ira una vez que se fuera. "Yo…".

Durante el viaje a casa, Arianne vio que la mano de Mark seguía sangrando y quería ayudar a envolverla, pero no tuvo las agallas para ni siquiera tocarlo. Mark estaba tan furioso en ese momento que incluso condujo su coche a gran velocidad. Solo podía agarrarse con cuidado del reposabrazos, ya que no se sentía segura ni siquiera con el cinturón de seguridad puesto.

Cuando llegaron al Chalet de Tremont, Mark salió primero del coche y fue al asiento del copiloto para sacar a Arianne del coche.

Solo así, bajo las miradas de todos en la casa, Mark agarró el brazo de Arianne mientras la arrastraba de regreso a su habitación y la arrojó fuertemente al suelo.

Arianne, asustada por haber sido arrojada, levantó los ojos para mirarlo. "¿Qué? ¿Quieres golpearme también? ¿Viste lo que pasó entre él y yo? Mark, ¿puedes escuchar alguna explicación en este momento? Si no puedes, no diré nada. ¡Haz lo que quieras! Ya lo golpeaste y también desahogaste tu enojo. Si eso no fue suficiente, ¡continúa!".