La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 214

La mano de Mark con articulaciones prominentes pellizcaba la barbilla de Arianne mientras daba un paso adelante y la miraba con una expresión de burla. "Yo... nunca te he visto como familia. Incluso cuando eras una niña, no me he olvidado de mi venganza. Cada vez que te veía, sentía ganas de matarte. Cuando llegaste a la pubertad, de repente me di cuenta de que habías crecido, volviéndote más agradable para mis ojos. ¿Entiendes lo que quiero decir? Esperé a que llegaras a los dieciocho antes de tenerte, pero Will Sivan te apartó de mí. Lo que me pertenecía fue manchado. ¿Qué crees que haré?”. Él continuó diciendo: “¿Cómo puedes ser tan tonta al pensar en mí como familia? Soy alguien que está esperando quitarte la vida. Solo te tengo ahora como mi juguete. ¿Por qué crees que te prohíbo interactuar con otros hombres? Es porque, como un objeto, eres mi posesión. No me gusta que otros te toquen. No te amo y nunca lo haré. Tampoco me importa si no me amas. Deja de hablar de cómo te cuidé durante diez años. No es divertido así”.

Arianne sintió como si estuviera mirando a un extraño mientras miraba al hombre que estaba frente a ella. ¿Realmente dijo esas palabras despiadadas? Ella solía pensar que era su disposición natural ser frío y distante, pero ahora, parecía que era realmente despiadado. Sus palabras fueron como cuchillas afiladas que la cortaron. El amor familiar que ella atesoraba no era más que una broma. El hombre con el que había pasado diez años solo pensaba en ella como un juguete.

Ah, ella realmente no tenía nada. Arianne contuvo las lágrimas en sus ojos y forzó una sonrisa en su rostro cuando dijo: “Gracias por ser honesto. No sabía que eso es lo que pensabas de mí. Ahora lo sé. Soy solo un juguete que acapara el título de la Sra. Tremont”.

La mano de Mark que le pellizcaba la barbilla se aflojó. Él podía ver el dolor en sus ojos. Parecía que ella no era tan inmune como él había pensado. Al final resultó que había momentos en los que ella también estaba triste.

Arianne ya no podía mirar a Mark a los ojos. Ella lo empujó ligeramente antes de bajar las escaleras. La pierna de Bola de Arroz había mejorado y él saltó a sus brazos. Llevó al gato al patio trasero y se sentó en el columpio, balanceándolos a ambos. Al mismo tiempo, las lágrimas corrían por su rostro. "Bola de Arroz, eres el único que tengo ahora. Tienes que vivir bien, ¿de acuerdo? Si también te pierdo, no sé qué haré”.

Como si entendiera a Arianne, Bola de Arroz maulló perezosamente.

Cuando Arianne escuchó pasos que se acercaban detrás de ella, ella rápidamente se secó las lágrimas y mostró una expresión indiferente en su rostro. Probablemente era Mary o Henry. Esos dos eran los únicos que estarían preocupados por ella en este lugar. Sin embargo, contrario a sus expectativas, era Nina quien apareció.

Nina se sentó a su lado con naturalidad y se balanceó en el columpio, siguiendo el ritmo de Arianne. “Te escuché discutir con Mark. Lo que dijo cruzó un poco la línea”.