La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 262

Ari siempre había ocultado la relación de Mark y Aery a Tiffany, pero ahora no tenía sentido ocultársela. "Tiffie, soy consciente de esto desde hace mucho tiempo. Aery era cercana a Mark en algún momento, pero él prometió que no volvería a contactarla. No hagas nada precipitado. Puedo encargarme de esto. Prométeme que no armaras un escándalo”.

Tiffie se quedó estupefacta. “¿A qué diablos estás jugando? Y me preguntaba por qué Aery nunca se llevó bien contigo. Entonces, no es por problemas familiares después de todo, ¡sino que ella ha estado mirando a tu hombre! Mark es ciertamente formidable: se casa con la hermana mayor y luego se enreda con la hermana menor. Solía ​​pensar que solo era malo contigo. Nunca pensé que él acabaría así. ¡Qué vergüenza, todo el mundo lo pone en un pedestal, pero en realidad es una escoria! ¡En serio, los hombres son todos cerdos!".

A Arianne le dolía la cabeza y estaba entrando en pánico por sentirse deprimida. Tenía que cambiar de tema. “Por cierto… De repente pensé que tal vez el Sr. Sloane de la carta conocía a mi padre. El nombre completo del Sr. Sloane es George Sloane. Solía ​​ser chófer del padre de Mark. También les mostré la foto de George Levin a Henry y Mary. Ahora puedo confirmar que George Levin es George Sloane. Él nos ha engañado. Ven conmigo al hogar de convalecientes mañana después del trabajo. Descansa temprano esta noche”.

¡Éxito! La atención de Tiffany cambió. "¿En serio? ¡Así que estaba justo debajo de tus narices! Debimos haberle preguntado a Henry y Mary en primer lugar. Bueno. Duerme temprano por la noche. Esto es más importante. ¡Nos ocuparemos de Mark más tarde!".

Arianne había perdido totalmente la capacidad de quedarse dormida después de que la llamada terminó. Ella sentía que su corazón se retorcía cada vez que pensaba en Mark y Aery juntos, haciendo quién sabe qué. Ella nunca solía preocuparse por estas cosas, pero ¿acaso él no se lo prometió? ¿Por qué tuvo que incumplir su palabra?

Plagada de pensamientos sobre el pasado y el futuro, ella decidió llamarlo de todos modos. El teléfono sonó durante mucho tiempo antes de que él lo respondiera. La voz nebulosa de Mark le respondió a través del auricular como si lo hubieran despertado de un sueño y no estuviera completamente consciente. "¿Aló?".

"¿Dónde estás?", preguntó Arianne, haciendo todo lo posible por controlar sus emociones.

A ella se le había olvidado que él tenía otra opción: siempre podía llamar a la casa si ella no contestaba el teléfono. "¿No es obvio?" ella estalló malhumorada. "No quiero responder su llamada. Tengo hambre, es hora de desayunar".

Henry se quedó sin habla. Bajó la voz a un susurro y dijo: "Señora... la llamada aún está en espera...".

Arianne se puso rígida. Ella sabía cómo funcionaba el teléfono en casa, lo que también significaba que era muy posible que Mark hubiera escuchado todo lo que había dicho. Sin embargo, no sintió ninguna culpa. "¿Y qué? Estoy ocupada".