La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 375

Arianne no tuvo otra opción. Sacó su teléfono y llamó a Mark con resignación. Nadie contestó el teléfono durante mucho tiempo. Justo cuando estaba a punto de colgar, Mark respondió de repente a la llamada. Escuchó su voz ronca y débil. “¿Aló?”.

Ella habló de manera superficial: “¿Por qué no regresaste a casa ayer? ¿Dónde estás ahora?”.

Mark guardó silencio por un momento antes de responder: “Pasé la noche en la villa de Jackson. Iré directo al trabajo”.

Ella no tenía nada más que decir. Lanzó una mirada a Mary, preguntando silenciosamente con sus ojos si podía terminar la llamada ahora.

Mary le hizo una mueca, pidiéndole que confirmara si Mark estaba realmente con Jackson en lugar de jugar con otras mujeres. Arianne sintió que era una molestia hacerlo, pero quería terminar con esto rápidamente para poder disfrutar de su comida. Escuchó a Mary y dijo: “Envíame un video”.

Mark colgó inmediatamente, pero le envió un video corto que duró alrededor de diez segundos. El vídeo mostraba el interior de la Villa de Bahía Agua Blanca que pertenecía a Jackson. Parecía que realmente pasó la noche en la villa de Jackson.

Mary le dio a Arianne un pulgar hacia arriba. “Así es. Deberías ser estricta con los hombres”.

Arianne sintió que era extraño tener que saber constantemente sobre su paradero. Lo que fue aún más extraño fue el cumplimiento de Mark con su deseo. Lo hizo parecer tan real.

Algo aún más extraño sucedió después. Mark le envió otro video cuando llegó a su empresa. Parecía que le estaba informando sobre su paradero. Él pensó que así era como ella quería que fuera. No mostró su rostro en el video, pero ella pudo ver sus zapatos.

Arianne no sabía por qué, pero en ese momento apareció en su mente un pensamiento travieso. De repente dijo en un tono exigente: “Solo puedo ver partes de tus zapatos. ¿Cómo sé si alguien más está grabando el video por ti?”. Ella estaba genuinamente curiosa sobre hasta qué punto iría él para cumplir con sus deseos.

Para su sorpresa, poco después recibió una video llamada de Mark.

Ella se puso nerviosa al ver esto. Su mano tembló y dejó caer su teléfono al suelo. Se calmó antes de finalmente contestar la video llamada. Ella desvió la cámara hacia Bola de Arroz que estaba durmiendo en el sofá para que él no pudiera verla.

Por otro lado, Mark fue bastante directo. La cámara le apuntaba directamente. No solo era guapo en persona, sino que se veía atractivo en el video. Aunque el teléfono se colocó en un ángulo bastante incómodo, aún así no quitó mérito a su apariencia. No se podía negar que era realmente guapo. Su buen aspecto no se vio afectado en absoluto, incluso si la cámara se colocó en el peor ángulo.

“¿Estás preocupada por mí?”. Él preguntó burlonamente mientras miraba los documentos en su escritorio.

“Es... Mary me obligó a hacerlo”. Ella le echó la culpa a Mary.

Después de que Tiffany respondió al mensaje de Arianne, volvió a guardar el teléfono en su bolso. Un coche se detuvo a su lado de repente. La ventana bajó, revelando el rostro de Ethan. “Déjame llevarte”.

Dijo irritada: “¿Somos amigos? Sr. Connor, deberíamos mantener una distancia adecuada el uno del otro ya que rompimos. No hagas nada extraño. No me digas que viniste hasta aquí por la mañana solo para llevarme”.

Ethan no le mintió. "Es verdad. Vine aquí solo para llevarte al trabajo. A partir de ahora, te recogeré cada vez que entres y salgas del trabajo. Sé que todavía no estás dispuesta a perdonarme. No volveré a pedirte que seas mi novia, pero ese es mi objetivo. Quiero hacerlo, y definitivamente puedo hacerlo”.

Seguía tan confiado como siempre. Ella estaba un poco sorprendida. Incluso en el pasado, nunca le había dicho tales cosas. ¿La perseguía por iniciativa propia? En el pasado, ella era quien perseguía y daba todo por él. ¿Quién sabía que vería el día en que él tomaría la iniciativa de perseguirla? Ella no esperaba que solo sucediera después de que se hubieran separado.

Sin embargo, fue manipulada por él y utilizada como peón. Naturalmente, no lo perdonaría fácilmente. “No tendrás éxito. No hay nada que puedas hacer para compensarme. Además, ya no te sirvo. Puedes tener lo que quieras ahora. ¿Qué necesitas con un peón como yo?”.

Los ojos brillantes de Ethan se llenaron de un matiz de tristeza. “Nunca te he tratado como a un peón. ¿No puedes olvidarte de las cosas desagradables que dije antes? Dame cinco minutos para explicarme”.

Tiffany vaciló un rato antes de entrar en el coche. “Solo cinco minutos”.