La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 614

Una expresión herida apareció en el rostro de Aye: "Pensé que éramos cercanas. ¿Tienes miedo de que sepa dónde vives? Estaba planeando invitarte a una ida de compras este fin de semana. Esto me entristece. Te trato como a una amiga, ¡pero parece que solo me ves como una colega!".

Tiffany miró a su alrededor con nerviosismo, temiendo que Jackson pudiera aparecer de repente. Toda la oficina se enteraría de ellos si una habladora como Aye se enterara. Todos sabrían que ella era su futura jefa. Ella se burló: "¿A qué hay que temerle?". Ella anotó la dirección de su propia casa.

Los ojos de Aye se iluminaron: "¡Realmente vamos por el mismo camino! Mi casa está en el pequeño barrio enfrente de la tuya. Tu casa está en una zona más cara que la mía. ¡Sabía que eras de una familia ricachona!".

Esto estaba completamente fuera de las expectativas de Tiffany. ¿Cómo podría haber tal coincidencia? Ella en serio deseaba que algunos secuestradores aparecieran de repente y se llevaran a Aye. “Erm… puede que no me vaya a casa esta noche. Me voy a casa de un amigo. Creo que hoy tendrás que irte a casa por tu cuenta”.

Cuanto más vacilaba Tiffany, más se aferraba Aye a ella. "¿Por qué tengo la sensación de que en realidad no quieres irte a casa conmigo? ¿Por qué estás siendo tan misteriosa? Siempre puedo evitar recargar mis reclamos de transporte...".

De repente, Tiffany vio un Porsche que se dirigía hacia ellos. Ella comenzó a entrar en pánico. "No es que no quiera ir a casa contigo. Vayamos de compras este fin de semana. ¿Está bien? Está bien. Maldita sea... ¿Por qué no hay taxistas…? Este debería ser un excelente lugar para tomar un taxi...".

Aye también había visto el coche de Jackson. Ella sugirió audazmente: "¿Crees que el Sr. West nos llevará a casa si se lo pedimos?"

La mente de Tiffany estaba zumbando. ¿La habían descubierto?

Poco después, Jackson detuvo su coche frente a ellas. Bajó la ventanilla y sonrió. "¿No pueden conseguir un taxi? Les daré un aventón. Es peligroso que dos mujeres estén solas por la noche”. Deliberadamente evitó mirar a Tiffany cuando habló.

Aye no notó nada fuera de lo común y sonrió enamorada. "Sí, Sí. ¡Usted es el mejor, Sr. West!".

¿Así que no la habían descubierto? Tiffany exhaló un largo suspiro de alivio. Afortunadamente, su hombre era bueno actuando. Ella sonrió tímidamente, siguiendo el juego, mientras decía: "¿No sería un inconveniente?".

Jackson miró a Tiffany de manera significativa y dijo: "Suban al coche”.

Se subió al asiento del pasajero por costumbre antes de quitarse los tacones que había estado usando todo el día y cruzó las piernas en el asiento.

Aye quien estaba sentada en el asiento trasero estaba mirando a Tiffany, sus ojos parecían como si fueran a salirse de sus órbitas. Ya no estaba de humor para admirar el coche de lujo de Jackson y tenía miedo de hablar directamente, preguntó en broma: "Sr. West, ¿a su... le importaría a tu prometida que otra mujer se sentara en el asiento del pasajero?”.

Entonces, Tiffany exhaló un suspiro de alivio. "Estoy agotada. Tuve que trabajar horas extras y actuar en una obra. Eres bastante bueno actuando. ¡Bravo!".

Jackson la miró con indulgencia. "Eres una mala actriz. Fuiste demasiado casual”.

Tiffany finalmente se dio cuenta de lo que quería decir y gimió lastimosamente. “Todo el mundo dice que un coche es como un segundo hogar. Es natural que instintivamente me relaje en mi propio hogar. Mis tacones me estaban matando. Los había estado usando todo el día. ¡Probablemente los perdería si no me los quito!".

Tan pronto como terminó de hablar, ella recibió un mensaje de Aye. "¿Has perdido la cabeza? No puedes actuar casualmente porque conoces al Sr. West. Ahora él está unido. Hubiera estado bien si tan solo te sentaras en el asiento del pasajero, pero hasta te quitaste los zapatos. Más importante aún, lo llamaste por su primer nombre. Sería malo si él te pone las cosas difíciles. ¡Realmente eres una idiota!".

Tiffany rompió a reír después de leer el mensaje. "Aye es realmente muy amable. Ella tiene miedo de que me pongas las cosas difíciles. ¡Pero ambos sabemos que no te atreverías!".

Jackson no le respondió. Se podía ver una sonrisa en su rostro. Para él, la felicidad era tan simple como esto. Estaba feliz de que su amada estuviera a su lado, y podía mimarla como una princesa y dejarla hacer lo que quisiera.

Tiffany finalmente volvió a sus sentidos después de un tiempo. "¿Por qué no me llevas a casa? Mi casa está justo enfrente de la de Aye. Ya es tarde. ¿Todavía quieres que vaya a tu casa? Estoy exhausta y tú también has trabajado horas extras. ¿No estás cansado? Déjame ir, ¿está bien?”.