La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 677

Hizo todo lo posible por estabilizar su respiración, para que pareciera que se había quedado dormida. Ella pensó que terminaría después de robarle unos besos, pero su mano comenzó a vagar. Su mente estaba hecha un desastre. ¿Era esto... normal? Eran marido y mujer, independientemente. No es que no hubieran tenido intimidad, sino que esta era la primera vez que... le hacía cosas en secreto.

"¿Ari?", de repente la llamó por su nombre suavemente. El tono no fue lo suficientemente fuerte como para intentar despertarla; simplemente estaba tratando de determinar si estaba dormida.

Arianne tenía doble ánimo sobre si obedecer o no, y decirle que todavía estaba despierta... Mientras lo reflexionaba, él fue un poco más lejos y la besó en los labios. De repente sintió que tal vez no era la mejor idea percibirlo basándose en sus impresiones sobre él en el pasado. No importa lo distante que estuviera, seguía siendo un hombre. Rara vez tuvieron relaciones sexuales, a pesar de haber estado casados ​​durante muchos años. Era normal que tuviera ciertos impulsos, ¿verdad?

Mark se sorprendió de que todavía estuviera despierta. Después de todo, después de quedar embarazada, por lo general se quedaba dormida de inmediato y muerta al mundo. Él se puso rígido y la trajo entre sus brazos.

Mientras tanto, en Villa Bahía Agua Blanca.

Tiffany se sentó en el sofá, remojando sus pies. El dolor de su estómago revuelto la palideció. Sin embargo, todavía tenía la energía para quejarse: "Jackson West, estoy sufriendo. ¿Por qué antes nunca me había dolido tanto? Debe ser culpa tuya. ¡Esto solo sucedió después de que comencé a salir contigo!".

Jackson le sirvió té de jengibre y dátiles rojos una vez que estuvo listo: "Nada se va a retrasar solo porque te hayas tomado un día libre. Simplemente no podré hacerte compañía en casa. Todavía tengo que hacer horas extras yo mismo. Todavía estaría en la oficina si no cenara contigo. Sé buena, vete a dormir después de beber eso. Si es demasiado doloroso, llámame. Deja aquí el agua para tu baño de pies. Lo tiraré cuando vuelva a casa. No tienes que hacerlo".

Tiffany se acostó, inmóvil. Ella le dio un beso al aire: "Eres el mejor. Sigue. Ven a casa temprano. Ya te extraño”.

Jackson sonrió, se puso el abrigo y salió por la puerta.