La Pequeña Novia del Sr. Mu romance Capítulo 912

Los golpes en la puerta incitaron a la Tanya desganada a salir de la cama antes de dirigirse hacia ella. Estaba demasiado cansada para preguntarse quién podría ser su visitante.

Abrió la puerta a un Jackson furioso y se quedó paralizada, sin saber cómo reaccionar.

El hombre que quería evitarla con desesperación había venido a buscarla.

“Si realmente quieres pegarle a alguien, ¡atacame! ¡Deja a mi mamá en paz!". Jackson estaba furioso, sus manos cerradas en puños. No era de golpear a las mujeres, incluso en su momento más enojado, se detuvo de actuar por impulso.

Tanya retrocedió al comprender. El recuerdo de lo que pasó antes la hizo bajar la cabeza avergonzada.

"No era mi intención hacerlo", ella susurró. "Lo sé, no importa qué cosas hirientes haya dicho tu mamá. No debí haber perdido el control de mis emociones y atacar... lo siento. Si ella necesita asistencia médica o algo, la pagaré. Todo lo que pido es que ustedes se detengan, por favor. Dejen de forzarme".

Jackson había perdido su capacidad de simpatizar con Tanya. "Deja esa fachada irritante de estar avergonzada, por el amor de Dios. ¡Lo hecho, hecho está! Demonios, si no fuera por que estás embarazada, ¡no habría detenido mis puños!".

De repente, Tanya miró hacia arriba para encontrarse con su mirada, lágrimas rodando por sus mejillas. "No quise lastimarla, lo juro. ¡Estoy harta de ser odiada como ‘la hija de un asesino’ toda mi vida! ¡Yo también quiero vivir como todos los demás! Pero por qué... ¿Por qué parece que nunca perteneceré a ningún lado? Todo lo que sueño es vivir más feliz y mejor que mi estúpido pasado. ¡Todo lo que siempre quise fue dejar estas sombras estúpidas detrás de mí, todas estas sombras traumáticas e injustas! ¡Quiero estar libre de ellos! ¿Por qué el mundo sigue haciendo que parezca que estoy equivocada? Yo... yo no quería que eso sucediera, Jackson. Estaba tan abrumada por mis emociones...".

Jackson estaba atónito. ¿Una “hija de asesino”? Era el tipo de frase que logró conmoverlo más que cualquier cantidad de lágrimas que Tanya pudiera sacar de sus ojos. Jackson no tenía ni una pizca de interés en el pasado de la mujer, pero tenía que admitir que esto le causó un gran impacto. Ahora, se sorprendió a sí mismo preguntándose qué dijo exactamente Summer que las había hecho pelear.

Tanya se mordió los labios. “Por favor, entra y habla conmigo un rato. Sí, me odias, lo sé. Pero solo por esta vez, ¿de acuerdo?”.

Jackson se dio la vuelta y la miró con asco. “¿Qué, otro plan que se está gestando en tu cabeza de nuevo? ¿De qué más podemos charlar? Tal vez hubiera dicho que sí antes de esa noche, ya que eres amiga de mi mujer. ¿Pero ahora? Siempre que te miro, todo lo que veo es escoria".

Sus palabras hicieron que Tanya se pusiera nerviosa. "No hay plan, ¿de acuerdo? Por favor, para... Deja de verme así. Te lo ruego".

Jackson vaciló por un momento antes de entrar en la sala y tomar asiento en un sofá bastante desordenado, aunque la impaciencia de su semblante no se desvaneció. Una parte de él se preguntaba por qué Tanya, conocida por su limpieza, tenía tan desarreglado su hogar. Pero pensaba que la pregunta era trivial y absolutamente indigna de su preocupación.