La venganza de una Gamma romance Capítulo 223

Morgan, la hija del Alfa.

Morgan

He sido mimada toda mi vida, pero extrañamente, después de mi decimosexto cumpleaños, mi familia dejó de hablarme. Necesito averiguar por qué.

***

Me despierto con una sonrisa en la cara, ayer fue el mejor día de mi vida. Anoche tuve mi fiesta de Dulces Dieciséis y mamá la organizó a la perfección, no soy una chica muy femenina, así que el rosa estaba fuera de discusión. Mamá había utilizado algunos de mis colores favoritos; índigo y granate.

Desde el mantel hasta las decoraciones, utilizó índigo y granate en todo. Solo nuestros miembros de la Manada fueron invitados, al igual que todos los años y eso vale para todas las fiestas que tenemos. Ya sea una fiesta para mí, para la Manada o para uno de mis seis hermanos mayores, mamá y papá nunca invitan a otras Manadas, es una regla no escrita dentro de nuestra Manada. Ha sido así durante siglos y dudo que cambie pronto.

Lo mejor de mis Dulces Dieciséis fue el regalo de mi familia, una Harley-Davidson Fat Boy y la ordenaron en mis colores favoritos; negro, índigo y granate. Incluso el atuendo, el casco y las botas son negros con índigo y granate.

La chaqueta me queda como un guante y lo mismo ocurre con los pantalones, ambos hechos de un material resistente a petición de mamá, sin duda. Mi casco es mi favorito después de la moto, porque Declan se aseguró de que el escudo de nuestra Manada estuviera aerografiado en ellos usando índigo y granate. Un lobo acostado cerca de la orilla del agua.

Las botas tienen un tacón de dos pulgadas con todas las características de protección posibles y nuevamente sé que mamá estaba detrás de eso, pero no me molesta en absoluto. Papá me hizo prometer que no montaría en mi moto hasta que Asthon me enseñara a conducir de manera segura y tuve que mantener una cara seria cuando le hice esa promesa. Si tan solo supiera que he estado montando la moto de Ashton durante seis meses.

Mi nombre es Morgan y soy la cachorra más joven del Alfa Tate y la Luna Giselle, como mencioné antes, tengo seis hermanos mayores. No me preguntes cómo lo hicieron nuestros padres, pero hay dos años y un mes entre cada uno de nosotros y para hacerlo aún más espeluznante, todos nacimos el primero de cada mes. Pasamos nuestro primer año en la misma habitación, ya que mamá quería que la guardería estuviera cerca de su habitación, hasta que en nuestro primer cumpleaños tendríamos nuestra propia habitación.

Todo estaba bien preparado semanas antes de que nacieran mis hermanos, papá se había asegurado de eso. El día antes de que yo naciera, Asthon le preguntó a mamá por qué no tenía una hermana bebé y mamá le dijo que no siempre obtenemos lo que queremos. Él le preguntó si no quería una niña y ella le dijo que si tenía una niña al día siguiente, estaría feliz.

Ashton y papá se rieron a carcajadas, ya que sabían a ciencia cierta que mamá no estaba embarazada, mamá y papá habían estado intentando tener otro cachorro desde que nació Landon y mamá se había sentido devastada cuando descubrió que no estaba embarazada unos meses antes de ese día. No quiso intentarlo de nuevo después de eso.

Mamá se desmayó al día siguiente justo después del desayuno y papá la llevó corriendo a la enfermería con mis hermanos corriendo detrás de él. Papá seguía sintiendo el dolor insoportable que mamá estaba experimentando de vez en cuando y pasaron horas antes de que nuestro médico de la Manada saliera a ver a papá.

Puedes imaginar la cara de papá cuando el doctor le dijo que tenía una niña. Mamá estaba en pánico porque nada estaba preparado para mí, pero no tuvo que entrar en pánico, ya que todos en nuestra Manada ayudaron a nuestras hembras Beta y Gamma. Mamá todavía me llama su pequeño milagro. Con Ashton nacido en enero, puedes hacer el cálculo del mes de mi nacimiento, soy una cachorra de verano ya que nací en julio.

Así que soy la más joven de siete cachorros y también la única hembra, pero mis hermanos nunca me trataron de manera diferente. Puede que sea la princesa de papá, pero no soy una consentida. Mamá y papá nos proveen de todo lo que necesitamos y si queremos algo extra, tenemos que trabajar por ello, algo que siempre hemos aceptado sin discutir.

Después de mi ducha seco mi cabello antes de trenzarlo y decido ponerme mis vaqueros ajustados de cintura alta color azul claro con una camisa negra que deja un hombro al descubierto. Cojo mis botas para combinar con mi atuendo y me aplico un poco de máscara de pestañas antes de salir de mi habitación, de nuevo me encuentro con silencio.

Decido revisar la cocina y cuando entro huelo que nadie ha estado aquí después de que me fui, esto realmente me preocupa porque mamá suele subir aquí para cambiarse antes del almuerzo. Camino de regreso hacia las habitaciones y puedo oler que nadie ha estado aquí en las últimas horas, lo cual es extraño porque mis hermanos siempre se duchan después de entrenar.

En este momento desearía que papá me hubiera iniciado en la Manada ayer, pero entiendo que no quería que tuviera un dolor de cabeza insoportable durante mi fiesta. Sería un poco más fácil si pudiera conectarme con mamá o papá, pero descubriré en el almuerzo qué está pasando y me siento un poco mejor sabiendo que veré a mi familia en unos minutos.

Decido revisar mi agenda en mi camino hacia el comedor principal para ver cuándo tengo mi día madre-hija con mamá y casi pierdo el equilibrio cuando no lo veo programado para esta semana. Repaso la agenda de los próximos tres meses, pero no veo ningún día madre-hija planeado.

Esto es tan diferente a mamá, ella ama nuestros días madre-hija y siempre los planea con anticipación. Es su forma de pasar tiempo conmigo y aunque al principio estaba renuente, espero con ansias esos días tanto como ella. Escucho murmullos provenientes del comedor y guardo mi teléfono en el bolsillo trasero mientras entro en la habitación.

Cada conversación se detiene por un segundo, pero pronto la habitación vuelve a llenarse de murmullos y cuando me vuelvo hacia nuestra mesa me doy cuenta de que mi familia aún no está allí. Me acerco al bufé para poner mis comidas favoritas en mi plato y cojo un capuchino antes de dirigirme a mi asiento.

Sonrío cuando escucho la voz de mamá acercándose, pero en el momento en que entra en el comedor cambia al enlace mental mientras mira a nuestra Beta hembra y no pasa mucho tiempo antes de darme cuenta de que todos están hablando a través del enlace mental.