Luna llena: acoplada con mis cuatro hermanastros romance Capítulo 132

Punto de vista de Alayah

Hago una lista de todo lo que quiero trasladar de la cabaña de la abuela a mi habitación, colocaré mi escritorio aquí ya que necesito estudiar de vez en cuando.

-Podrías hacer eso en la cabaña de la abuela, así evitarás que otros te interrumpan-, sugiere Topaz y asiento con la cabeza mientras pienso en esa opción. Para cuando he anotado todo lo que quiero traer aquí, Anton entra para llevarme al piso del Alfa.

-Marc y Crystal acaban de llegar, Marc me pidió que te trajera. Parece pensar que asustaremos a su Mate-, dice Anton y puedo entender la preocupación de Marc, mi primo puede ser un idiota de vez en cuando.

Al igual que yo, Anton no tiene filtro, la diferencia es que yo sé cuándo mantener la boca cerrada y eso es algo que Anton es incapaz de hacer a menos que esté en una reunión.

Con la familia y amigos a su alrededor, Anton tiende a decir lo primero que se le ocurre y me ha avergonzado más veces de las que me gustaría recordar.

Me conoce desde hace poco más de cinco años y sin embargo parece conocer todos mis secretos, no es que tenga alguno, pero así se siente.

Siempre hace comentarios que me hacen ponerme de todos los colores y luego, para empeorar las cosas, me elogia por el bonito tono rojo de mis mejillas.

Gamma John me ha estado entrenando desde que conocí por primera vez a la familia de mi padre y está esperando el día en que le dé una paliza a Anton, algo que Topaz espera con ansias.

Abuelo me pidió que advirtiera a toda la manada cuando eso suceda, porque quiere hacer una apuesta sobre cuánto tiempo me llevará poner a Anton en su lugar y sé que casi todos los miembros de la manada están esperando ese día para anunciar al ganador de su apuesta.

-Alayah, llegaste-. Escucho a Marc exclamar y me rio mientras él arrastra a una mujer rubia hacia mí.

-Marc, me pediste que viniera a conocer a tu Mate y como tu amiga creo que es mi derecho explicarle algunas cosas sobre ti a tu Mate-, respondo mientras le doy un abrazo rápido, miro a Crystal mientras sus ojos van de Marc a mí y le digo que no se preocupe.

-Me alegra que haya encontrado a su Mate y que no sea yo, dudo que sobreviviera viviendo conmigo por más de veinticuatro horas-, digo bromeando y ella se ríe ante el gesto de enfado en la cara de Marc.

-Alayah, mejor cuida tu boca. Marc será tu Alfa algún día-, dice Anton a mi lado antes de presentarse a Crystal.

Crystal me pregunta por qué la abuela sabría algo así y cuando explico que solía ser maestra, me comprende.

La abuela siempre había podido responder a todas las preguntas que tenía y en casi todos los casos tenía una historia para acompañarla, algo que siempre disfruté escuchando. Es una gran cuentacuentos y siempre tenía una historia increíble para mí, cada una de ellas enseñándome una lección valiosa.

A medida que crecía, las historias cambiaban, no todas con un final feliz. Escuché sobre antiguos Reyes y Alfas que se equivocaron, escuché sobre hombres y mujeres que intentaban ganar poder y estatus y escuché sobre la forma en que el vínculo de pareja funcionaba siglos atrás.

Pensé que nuestra Diosa nos había abandonado, pero la abuela me dijo que nuestra Diosa decidió volver a la antigua forma de encontrar una pareja. Una forma que había funcionado durante siglos, antes de que decidiera interferir con el vínculo de pareja y hacer que más hombres y mujeres fueran rechazados.

La abuela está convencida de que la Diosa aprendió de su error y después de siglos de ver a sus hijos rechazar a la persona más adecuada para ellos, volvió a una forma que sabía que era mejor para todos nosotros.

Según la abuela, pasó mucho tiempo antes de que nuestros Lobos y Licántropos pudieran acostumbrarse a esta forma nuevamente, pero hoy en día nuestros Lobos y Licántropos pueden sentir una conexión de inmediato y a partir de ahí el vínculo de pareja crece.

Topaz y yo todavía estamos esperando el día en que sintamos esa conexión con alguien y esperaremos ese día hasta que tomemos nuestro último aliento si es necesario, no nos conformaremos con una pareja elegida.