Mi Frío Exmarido (Amelia y Dorian) romance Capítulo 1026

"Él solo estaba hablando sin pensar, no tienes por qué hacerle caso.", dijo Amelia.

Dorian la miró de reojo: "No estarás de acuerdo con su absurda idea, ¿verdad?"

Se veía bastante mal, claramente aún molesto por Lorenzo, y bastante enojado.

"No tenía intención de estar de acuerdo." Amelia se apresuró a tranquilizarlo.

Pero los oscuros ojos de Dorian aún la observaban fijamente, sin soltarla. No estaba claro si era porque ella le había dado un motivo de desconfianza antes o si las palabras de Lorenzo habían sido demasiado hirientes, hasta el punto de hacerle perder la confianza en ella.

"De verdad no voy a tomar riesgos." Amelia le aseguró en voz baja, "Apenas anoche sobreviví por poco, ¿cómo podría ser tan insensata de buscar emociones fuertes? No es que me sobre la vida precisamente."

"Mejor que pienses así." Dorian dijo con severidad, examinándola de arriba abajo intensamente, como evaluando la veracidad de sus palabras.

Amelia se quedó sin palabras, y le preguntó tentativamente, "¿Es que tengo antecedentes?"

Dorian hizo un sonido de afirmación: "Hablas sin pensar."

Amelia se quedó sin palabras.

"Imposible." Amelia, recuperándose, refutó de inmediato su evaluación, "Mi educación me enseñó a ser una persona de palabra, siempre cumplo lo que digo."

"Ja..." Dorian soltó un despectivo "ja" hacia ella, "Lástima que tu educación te enseñó que no necesitas ser honesta frente a mí."

Amelia se quedó en silencio.

"Cuántas veces, un segundo antes me prometes algo y al siguiente ya te has desvanecido sin dejar rastro."

Dorian empezó a contar y se llenó de quejas, esta actitud de decir una cosa y hacer otra parecía ser su segunda naturaleza.

Amelia, sin poder evitarlo, se enderezó, "Entonces, definitivamente no habría dicho que sí directamente."

Ella no le daría esa ventaja, y además, no le gustaba mentir.

"Claro, tú no dirías que sí directamente. Eres una experta jugando con las palabras." Dorian dijo, "Como aquella vez, me hiciste creer que te habías deshecho del bebé sin decir sí ni no, solo llorabas, para luego poder afirmar con toda tu dignidad que nunca lo habías dicho."

Amelia permaneció en silencio.