Dorian se dio cuenta de la incomodidad de Amelia.
Después de ver la sonrisa forzada en los labios de ella, Dorian finalmente le habló a Lorenzo:
"¿Así que tienes mucho tiempo libre?"
"Estos días no tengo mucho que hacer."
Lorenzo respondió, sin darle importancia al tono ligeramente sarcástico de Dorian, ya estaba mirando a Amelia, "Estos días, los abuelos y mis padres están en casa, mira cuándo tienes tiempo y ven a comer con nosotros."
Aunque ya había mencionado este tema antes, lo trajo de nuevo, incluso mencionando a la abuela.
Amelia no aceptó de inmediato, todavía con una distancia cortés en su tono, dijo: "Está bien, si tengo tiempo iré a visitar a la abuela."
Para Lorenzo, se sentía como si hubiera una pared frente a Amelia, impenetrable.
De hecho, Lorenzo estaba algo derrotado, sin saber cómo derribar la pared que Amelia había construido frente a ella, su mirada en busca de ayuda se volvió hacia Dorian.
Dorian solo le lanzó una mirada indiferente, sin intervenir ni involucrarse.
Dorian ya estaba muy familiarizado con esta actitud impenetrable de Amelia. En aquel entonces, ella lo trató a él de la misma manera que ahora trata a Lorenzo. Lorenzo ya tenía mucha suerte comparado con lo que Dorian había experimentado.
Hasta hoy, todavía teme que Amelia recupere su memoria, ¿cómo podría ayudar a Lorenzo a sentirse mejor?
Cada uno debe enfrentar las consecuencias de sus propias acciones.
Esa mirada de Dorian transmitió claramente este mensaje.
Lorenzo también entendió este mensaje y, después de un largo suspiro, volteó hacia Amelia y le preguntó con suavidad: "¿Es porque no hemos hecho la prueba de paternidad, sin probar que somos una familia, que no puedes acercarte a ellos?"
Durante el tiempo que Amelia estuvo herida y recuperándose, cuando fueron a verla, ella no estaba acostumbrada a este afecto repentino y sugirió hacer una prueba de paternidad. Pero él dudó, sintiendo que Amelia quería hacer la prueba para cortar lazos con ellos.
Pero ahora, viendo a Amelia, a quien no podía acercarse de ninguna manera, solo podía poner su esperanza en el informe de la prueba de paternidad, que demostraba que eran familia. Tal vez, al ver el informe que realmente probaba que ella era la hija de la familia Sabín, ¿se abriría un poco su corazón?
Amelia lo miró un poco sorprendida, aún sin saber qué responder, Lorenzo ya había hablado de nuevo: "Entonces, hagamos la prueba de paternidad."

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