Mi Frío Exmarido (Amelia y Dorian) romance Capítulo 1176

"Oh, sí." Amelia pareció volver en sí, sonriendo con timidez a Dorian, "Si incluso yo puedo entender la gravedad de esto, tú no podrías no haberlo notado."

Dorian también sonrió, sintiendo cómo su corazón, que había estado en vilo, volvía a su lugar por la repentina sonrisa de ella.

"Primero comamos."

Dijo, volviendo a acercar la caja de comida.

"Déjame hacerlo."

Amelia se adelantó rápidamente, tomando la caja de comida de las manos de Dorian con rapidez.

Dorian le echó un vistazo, pero Amelia parecía no notarlo, desarmó los cubiertos y comenzó a comer.

"Fabiana todavía está bajo investigación."

Dorian comentó, "Todavía no puede ser juzgada."

"No importa." Amelia respondió, "De todos modos, era solo una sospecha, no necesariamente tiene que ser ella..."

"Está involucrada."

Dorian afirmó.

Amelia asintió, sin decir más, comiendo en silencio.

Más que estar comiendo, usaba el acto de masticar para permitir que su mente, todavía confusa, pudiera aclararse poco a poco.

Pero el efecto no era muy notorio.

Toda su cabeza se sentía aturdida y poco clara, y no sabía si era por el golpe en la cabeza.

Su mano izquierda, sin darse cuenta, se dirigió hacia la parte posterior de su cabeza, donde todavía podía sentir la cicatriz.

Frunció el ceño en confusión.

Mientras comía con la cabeza gacha, Dorian no pudo ver la expresión en sus ojos, solo notó el gesto de ella tocándose la nuca.

Ese era el lugar donde, poco antes, Cintia la había empujado accidentalmente contra la encimera.

"¿Te duele la cabeza otra vez?"

Preguntó Dorian con preocupación, acercándose un poco más a ella, su mano fue naturalmente a apartarle el pelo, pero Amelia se tensó de inmediato, moviéndose apenas perceptiblemente hacia un lado.

"Yo..."

Amelia solo sentía su mente en un caos, de hecho había escrito una carta de reconciliación a Dorian antes del incidente, en la cual le decía que volvieran a estar juntos.

Pero esa carta...

Tomó su teléfono apresuradamente, abriendo rápidamente la aplicación donde había dejado la carta, y esta apareció.

Instintivamente giró el teléfono, presionándolo contra su pecho.

Dorian ya había visto la aplicación que abrió: "No es como si no lo hubiera visto antes, ¿por qué estás tan nerviosa?"

Amelia: "..."

"Creo que..." Amelia respiró hondo, tratando de hacer que su expresión fuera objetiva y clara, "Es mejor dejar esto para más adelante. A veces cuando tomo decisiones, puede que sea solo un impulso del momento..."

Dorian la interrumpió: "Habla claro."

Amelia apretó los labios, levantando la mirada hacia él: "Dorian, no podemos registrar el matrimonio."