Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1077

Fuera del centro comercial.

Patricia llamó a Bryan por teléfono.

Bryan contestó.

—Presidente Bryan, soy Patricia. Acabo de ver a tu exesposa en el centro comercial.

Al principio, Bryan respondió con cortesía, pero cuando escuchó la palabra "exesposa", levantó una ceja. —¿Oh?

—Ella tiene una manera de actuar que no es muy adecuada. Es fácil que ofenda a la gente. Aunque solo sea tu exesposa, presidente Bryan, sería mejor advertirle un poco —Patricia sugirió con aparente buena intención.

Bryan frunció el ceño: —¿A quién ha ofendido?

Patricia le describió brevemente la situación: —Actuando así, es fácil que la gente la utilice.

—¿En qué centro comercial? —preguntó Bryan.

Patricia le dio la ubicación exacta.

Sabía muy bien que personas en la posición de Bryan no permitirían que otros las calumniaran.

Por eso, estaba segura de que Bryan buscaría a Beatriz.

—No te preocupes por nada mientras yo esté aquí. Puede decir lo que quiera. Patricia, no pretendas ser tan digna frente a mí. Sé exactamente lo que pasa contigo y la familia Jiménez. Si haces que ella se sienta mal, no me culpes por no ser cortés —La voz de Bryan era fría y cortante tras un breve silencio.

Patricia quedó boquiabierta al escuchar a Bryan, completamente sorprendida.

¿Qué estaba pasando en el mundo?

¿Bryan realmente estaba protegiendo a su exesposa de esa manera?

Si todavía la amaba, ¿por qué se divorciaron?

¿Amenazarla por una exesposa?

—Bryan, solo estaba tratando de ser amable, ¿era necesario eso?

Sin esperar la respuesta de Bryan, Patricia colgó rápidamente.

Observando a los transeúntes apresurados en la calle, de repente se sintió perdida.

Era una buena oportunidad para alejarse de Ciudad A y disminuir la vigilancia.

Antes de salir de casa, Ana había recibido una llamada de Ignacio.

Él le informó que habían perdido el rastro de la abuela Ruiz.

Era como si la abuela Ruiz hubiera desaparecido en el aire.

Luego le preguntó sobre su situación actual, pero Ana no podía decirle mucho. Solo le aseguró que estaba bien.

La desaparición de la abuela Ruiz confirmaba las sospechas que ella y Alejandro tenían.

Ahora solo quedaba esperar que la persona detrás de todo esto no pudiera resistirse a actuar.

Beatriz asintió repetidamente: —Estos días, el señor Mauricio también está descansando. Me dio varios días libres, así que compraré los otros dos conjuntos de ropa. Luego iré a buscar unos zapatos que combinen con los vestidos. ¡Estoy tan emocionada solo de pensar en las hermosas fotos que tomaremos!

Ana pagó por los varios conjuntos de vestidos que Beatriz había elegido.

Justo cuando estaba regresando después de pagar, de repente vio a Bryan entrar.