Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1255

Verónica lucía un maquillaje perfecto y un carisma deslumbrante.

En el momento en que vio a Ana, sus ojos se agrandaron de inmediato. —Sabía muy bien que eras tú, la intuición femenina nunca falla. Siempre decías que no querías ser la amante secreta de alguien, pero en realidad estás seduciendo a un hombre comprometido, Ana, ¿no es eso ser una persona demasiada baja?

Nunca había visto a Gonzalo chatear en privado con alguien en WhatsApp.

Además, Gonzalo apenas tenía amigos en WhatsApp.

Antes, cuando chateaba en WhatsApp, siempre era por trabajo.

Pero ahora Gonzalo estaba chateando con Ana en WhatsApp, incluso se preocupaba de forma proactiva por si el vuelo de Ana de ese día había sido cancelado. Al principio, pensó que era algún hombre tratando de seducirlo, y no pensó en Ana en ese momento

Después, al ver algunos de los registros de chat entre ellos, aunque no muchos, solo unas pocas palabras y una foto, de repente pensó en Ana.

La inquietud en su corazón comenzó a crecer de forma vertiginosa, y finalmente decidió hacerle una videollamada a Ana.

Cuando vio la cara de Ana, estalló en ira.

Ana respondió con un rostro impasible: —Puedes ver con detenimiento los registros del chat, te aconsejo que no asumas que todas son amantes secretas de él. Eso solo hará que la gente piense que vives con miedo de que tu prometido sea robado. Eso muestra tu falta de confianza y que quizás tu relación no está realmente establecida en términos legítimos.

—Nuestra relación es completamente normal. No pienses que no sé lo que estás pensando. ¿Acaso no es porque tu esposo murió que ahora quieres robar el de alguien más? — Verónica respondió enfurecida con la cara roja de ira.

En ese preciso momento, Manuel, que se había despertado y había bajado sin saberlo, le arrebató el celular de las manos a Ana.

Luego, se dirigió a Verónica y le gritó: —¡Me parece que tú eres la que parece una amante secreta de hombres! ¡Cuida a tu hombre! ¡Si se atreve a molestar a Anita de nuevo, no me culpes si busco a los medios para exponerlo!

Verónica no esperaba que hubiera otra persona con Ana, y mucho menos un hombre.

De hecho el tipo parecía igual de atractivo que Gonzalo.

Sus palabras estaban llenas por completo de protección hacia Ana.

¿De dónde salió este hombre?

Ana lo dijo repetidamente.

—Voy a lavarte algunas frutas, — dijo Manuel, sintiéndose más relajado después de hablar.

—

[Esa era tu novio, ¿verdad?]

Verónica escribió un mensaje y trató de enviarlo.

¡Pero el envío falló!

¡Ya no eran amigos!

De repente, Verónica sintió pánico; había aprovechado el momento en que Gonzalo salió y olvidó su celular para espiar, y si él descubría que ella estuvo espiando y además contactó a Ana y fue bloqueada, ¡no sabría cómo explicarlo!