Mi Matrimonio Inmediato con un Magnate romance Capítulo 1376

Tres días después.

Después de más de tres años, Eduardo volvió a ver a Alejandro.

Sus ojos estaban rojos, y las cicatrices en su rostro, tras los tratamientos hospitalarios, se habían atenuado bastante. Las que no podían atenuarse estaban en proceso de ser tratadas con cirugía estética.

Consciente de que las cicatrices en su rostro podrían resultar aterradoras, se dio la vuelta rápidamente y dijo: —¡Presidente Alejandro, estoy tan feliz!

—¿El Gonzalo que fue capturado contigo aquel año murió? —preguntó Alejandro.

Eduardo asintió con la cabeza. —Sí, murió. Lo capturaron cuando intentábamos escapar y lo golpearon hasta matarlo. De hecho, se parecía mucho a usted, presidente Alejandro, aunque su carácter era algo débil y solo al principio podía confundirse con usted.

La mirada de Alejandro se profundizó.

Al ver que Eduardo evitaba su mirada, volvió a hablar: —Mírame de nuevo, no me asustarás.

Eduardo, al oír esto, vaciló, pero finalmente se volvió hacia él.

—¿Puedes recuperarte completamente en un mes y trabajar conmigo? —preguntó Alejandro.

Eduardo abrió los ojos de par en par. —¿Presidente Alejandro? ¿Recuperó la memoria? ¿No decían que la había perdido?

Alejandro soltó una ligera risa. —¿La amnesia impide trabajar?

—Ah, no, no lo impide —Eduardo sintió que algo ardiente en sus huesos se reavivaba.

Su estado mental había mejorado mucho en ese tiempo.

Dos días antes, Ana le había dicho que el presidente Alejandro había regresado, y él había dudado sobre cómo enfrentarlo, pero ahora parecía que todas esas emociones se habían desvanecido.

Había investigado la situación actual del Grupo García, y en más de tres años, el actual presidente había cambiado casi todo el personal.

Así que volver al Grupo García no sería fácil.

Era una batalla feroz.

Pero cuanto más feroz, más necesario era el desafío.

Muchos especulaban si Alejandro intentaría retomar el control del Grupo García.

Sin embargo, Alejandro, por muy capaz que fuera, se enfrentaría a un Grupo García muy diferente al de hace tres años.

Mientras todos especulaban sobre los próximos movimientos de Alejandro y los posibles grandes desafíos dentro del Grupo García, algunos tomaron una ruta diferente.

Habían localizado a Valentina, la prometida de Alejandro.

Incluso muchos periodistas acudieron a interceptar a Valentina justo después de que ella participara en un programa de variedades musical.

Valentina, al saber que Alejandro seguía con vida y tras haberse reunido con Ana hacía unos días, reflexionó sobre cómo la historia de Alejandro estaba llena de dificultades, lo que le inspiró en su creatividad.

Sin embargo, nunca esperó que los astutos periodistas acudieran a ella tan rápido.

De repente, recordó que hacía más de tres años que era la prometida de Alejandro.

Frente a los periodistas, se sintió completamente impotente. Sin haber hablado con Alejandro ni con Ana, ahora no sabía cómo responder.